El flujo de centroamericanos y cubanos en tránsito por México sigue al alza. En tanto, se redujo el número de asiáticos y africanos devueltos a sus países de origen.

Las cifras más recientes de la Secretaría de Gobernación muestran la supremacía de guatemaltecos presentados ante la autoridad migratoria (40 por ciento del total), pese a que los ciudadanos de esta nacionalidad tienen opciones para residir o trabajar temporal y legalmente en la franja sureña de México.

Igualmente, el aumento de cubanos en tránsito por nuestro país sigue imparable a números no vistos en al menos una década.

En septiembre fueron presentados ante el Instituto Nacional de Migración (INM) mil 645 isleños y, en octubre, 2 mil 449, diez veces más que los 213 de enero.

En total, el acumulado de ciudadanos procedentes de Cuba es de 9 mil 46, equivalentes a prácticamente 100 por ciento del grupo de personas procedentes de las islas del Caribe en general y a casi 6 por ciento del total de extranjeros presentados ante la autoridad migratoria.

Ese nivel no tiene precedente en los años recientes; por ejemplo, en 2005, el total anual de ciudadanos procedentes de Cuba fue de 2 mil 660; un año después, 2 mil 5, y en 2007, mil 438. En este último año, el total de extranjeros en esa condición fue de 120 mil. Es decir, los cubanos representaban en el primer año del sexenio calderonista 1.1 por ciento.

Investigadores y funcionarios del área de migración señalan un factor que explicaría el fenómeno: la nueva relación entre Estados Unidos y Cuba que significaría la anulación de la ley que da actualmente a los isleños residencia legal en el vecino país del norte.

México aplica la ley en cuanto a avisar a las instancias consulares de La Habana para que verifiquen la nacionalidad de los asegurados; una vez concluido este paso les extendería oficios de salida del país en un plazo determinado.

Lo anterior debido a que el número de repatriados cubanos es muy bajo. De enero a octubre de este año, el INM devolvió a 335 cubanos de un total de 9 mil 46 presentados ante la autoridad.

Un parámetro mas drástico ocurre con los asiáticos y africanos; en el primer caso, se detuvo a mil 765 y se repatrió sólo a 48. De los africanos, se captó a mil 659 y se devolvió a su país de origen a cuatro.