En Teúl de González Ortega, Zacatecas, Andrés Manuel López Obrador señaló que en vez de una reforma electoral con dedicatoria como la planteada por PRI y PAN se necesita voluntad para sancionar a quienes compran votos, que es el principal problema que enfrenta el Morena, aunque es muy difícil, como pedirle peras al olmo.

Informó que 70 por ciento de los votos que obtienen PRI, PAN y PRD son comprados, y lo que da más coraje es que la gente humilde y pobre, por las circunstancias, por la compra del sufragio, vota por sus verdugos, por los partidos de la mafia del poder.

López Obrador sostuvo que la reforma tendría que evitar que lo borren de los espots que se transmiten en tiempos oficiales en radio y televisión. Asimismo, se debería impedir de manera efectiva la compra espacios en los medios de comunicación. De otro modo se regresaría al tiempo de las elecciones de 2006, donde los potentados como Claudio X. González violaron la ley electoral, señaló.

Recordó que hubo impunidad en la elección de 2012, se probó que el PRI entregó tarjetas y compró 5 millones de votos para beneficiar a (Enrique) Peña Nieto, pero el Instituto Federal Electoral, actualmente INE, y el Tribunal Electoral lo protegieron.

Actualmente se investiga al ex subsecretario de Gobernación, Arturo Escobar, acusado de cometer delitos electorales cuando fue vocero y secretario de procesos electorales del Partido Verde Ecologista de México (PVEM), dijo.

Señaló que las autoridades no le harán nada a Escobar, sólo le quitaron el cargo, hay impunidad y está probado que en los comicios de 2015 compraron votos, entregaron millones de mochilas, playeras y útiles escolares.

Indicó que Emilio González, ex dirigente nacional del PVEM, declaró que le habían hecho el favor al sistema parando a Morena, por eso utilizaron todo el dinero, o sea le hicieron el trabajo sucio al sistema, al régimen y, como favor correspondido, Enrique Peña y Miguel Ángel Osorio Chong, pusieron a Escobar en la subsecretaría de Gobernación.