Hay indicios de planes para agredir, afirma el premier Michel
atentado terrorista; cierran comercios
Domingo 22 de noviembre de 2015, p. 27
Bruselas.
La amenaza de un atentado terrorista inminente paralizó este sábado la vida en la capital belga, Bruselas, que se encuentra en alerta máxima una semana después de los ataques en París. El primer ministro, Charles Michel, aseguró que hay indicios de planes para cometer un atentado en esta ciudad.
El diario británico The Independent informó que el detenido Hamza Attou, quien supuestamente era amigo de Salah Abdesslam, uno de los presuntos agresores en París y quien actualmente está prófugo, podría tener un cinturón de explosivos.
La actividad en la capital centroeuropea se fue reduciendo considerablemente a lo largo de la jornada. En el centro, muchos comercios cerraron y las calles se fueron vaciando.
El Metro permanecerá cerrado hasta el domingo, por razones de seguridad. Sólo circulan autobuses y el tranvía en la ciudad. Además, en las estaciones de tren se reforzaron los controles a los pasajeros y se podía ver a soldados patrullando.
El Atomium, uno de los sitios turísticos de la ciudad, permanecía cerrado. Se cancelaron el festival de música Sound-Check, un concierto del cantante Johnny Hallyday y los partidos de futbol que se iban a jugar este fin de semana en Bruselas.
También permanecieron cerrados los mercados y se suspendieron los eventos deportivos, anunció el ministro de la región de Bruselas, Rudi Vervoort. No hay riesgo cero, pero hacemos todo lo que está en nuestras manos para garantizar la seguridad de los ciudadanos.
Bélgica pasó a un primer plano tras los ataques en París por los estrechos lazos de los agresores con Bruselas. El presunto organizador de los atentados, Abdelhamid Abaaoud, era belga de raíces marroquíes y vivió en el barrio de Molenbeek.
Bruselas es sede de numerosas instituciones europeas y de la Organización del Tratado del Atlántico Norte. En la región capitalina viven más de un millón de personas.