Fue asistente de David Alfaro Siqueiros y discípulo de Manuel Rodríguez Lozano
Colaboró con el director de teatro Julio Prieto y con el ballet nacional de Guillermina Bravo
Dedicó sus últimos años a enseñar español a internos latinos de un centro de readaptación
Miércoles 18 de noviembre de 2015, p. 7
El pintor, escenógrafo y exiliado republicano español Marcial Rodríguez Fernández (Málaga, 5 febrero, 1926) falleció el lunes 9 de noviembre en Estados Unidos, informa la familia del artista.
Marcial Rodríguez se dedicó a la pintura, la escenografía y la escultura en México, de 1948 a 1955. Luego se fue a residir al vecino país del norte.
Desde niño mostró gran inteligencia y sensibilidad en sus habilidades artísticas y fue contemporáneo de Antonio López Mancera, Xavier Rojas, Guillermina Bravo, Raúl Flores Canelo y periodistas de esa época.
En la biografía de Marcial Rodríguez destaca que cuando comenzó la Guerra Civil española, en 1936, él tenía 10 años, y ya estudiaba pintura en la escuela de arte de San Telmo, en Málaga. Después se trasladó con su familia a Cataluña, donde estudió en Olot.
Además, a corta edad se interesó por la astrología, la biología y la geografía, amaba las plantas y los animales, y sobre todo, tenía pasión por los insectos, que coleccionaba.
También fue asistente de David Alfaro Siqueiros y discípulo de Manuel Rodríguez Lozano. En el Instituto Nacional de Bellas Artes se graduó de escenógrafo y, junto con Antonio López Mancera, fue asistente de Julio Prieto.
Pionero de la televisión en México
De 1951 a 1954 fue el escenógrafo titular de ballet nacional que dirigía Guillermina Bravo, compañía donde tuvo a su cargo la escenografía, el diseño de vestuario e iluminación de coreografías como La maestra rural, Concerto y Fuga, de Josefina Lavalle, además de La nube estéril, de Bravo, y Sonata, de Lin Durán, entre otras.
Para teatro realizó la escenografía e iluminación de varias obras dirigidas por Xavier Rojas y fue pionero de la televisión mexicana, pues tuvo a su cargo la escenografía y la iluminación de los programas musicales de Chrysler.
Marcial Rodríguez dedicó sus últimos a sus bonsáis, a pintar y enseñar español a jóvenes delincuentes latinos internados en un centro de readaptación.
El artista falleció el 9 de noviembre en Jim Thorpe, Pensilvania, acompañado de su esposa Francine, sus hijos Alina y Marcial León, y su yerno Scott.