Alberto Gasbarri, coordinador de viajes internacionales del papa Francisco, se reunió la tarde de ayer en privado con el presidente Enrique Peña Nieto en Los Pinos para afinar los detalles de la agenda del pontífice en su visita a México.

El encuentro duró media hora, de acuerdo con fuentes eclesiales, que informaron que el enviado papal se reunió antes con el jefe de Gobierno capitalino, Miguel Ángel Mancera, en el salón Benito Juárez del Antiguo Palacio del Ayuntamiento, en el Zócalo.

Mancera resaltó la plena disposición del gobierno de la ciudad de México para garantizar todos los detalles necesarios que aseguren el éxito de la estancia del pontífice en la capital del país.

Gasbarri y su comitiva de tres personas visitaron la víspera la Catedral Metropolitana y la Basílica de Guadalupe, a esta última lo acompañaron Eugenio Lira Rugarcía, secretario general de la Conferencia del Episcopado Mexicano; Christophe Pierre, nuncio apostólico en México; Arturo Manuel Díaz de León, director de Asociaciones Religiosas de la Secretaría de Gobernación y un representante de la Arquidiócesis de México.

En el recinto mariano analizó, junto a Enrique Glennie, rector del templo, los detalles de la celebración religiosa que oficiará el papa Francisco, quien ha expresado su devoción por la guadalupana.

La mañana de hoy, Gasbarri estará en San Cristóbal de las Casas, donde será recibido por el obispo de la diócesis, Felipe Arizmendi Esquivel; por la tarde se trasladará a Michoacán para un encuentro con el cardenal Alberto Suárez Inda, titular de la arquidiócesis de Morelia.

El sábado, Gasbarri regresará al Vaticano para exponer al pontífice los detalles de su visita a México y preparar el viaje de una semana previsto a partir del 12 de febrero de 2016.