El gobierno mexicano busca evitar que en el sector de hidrocarburos se genere una concentración de empresas como existe en otras actividades de la economía mexicana, sostuvo este jueves Pedro Joaquín Coldwell, secretario de Energía. Anunció que en dos o tres años comenzará a ser producida gasolina de bajo contenido de azufre, luego de que fue autorizada la reconfiguración para tal fin de la refinería de Petróleos Mexicanos (Pemex) en Tula, Hidalgo.

No queremos ver en el sector de hidrocarburos la concentración que existe en otras áreas; queremos un sistema industrial privado de hidrocarburos en México altamente diversificado, en el que participen compañías petroleras de gran escala, pero también pequeñas y medianas, declaró Joaquín Coldwell en un foro organizado por la revista The Economist.

Como parte de la implementación de la reforma energética se están generando incentivos para que nazca una industria mexicana, asociada con la internacional o compitiendo con ella, añadió el titular de Energía.

La tercera licitación de campos petroleros en la que participarán compañías privadas, dijo, se va a llevar a cabo el 15 de diciembre. Hasta ahora, añadió, hay 59 empresas en proceso de calificación para participar en ese proceso.

Cada una de las cinco licitaciones de la primera ronda de subastas de campos petroleros (hasta ahora se ha realizado una en la que participó en exclusiva Petróleos Mexicanos y otras dos para compañías privadas) está diseñada para distintas escalas de empresas, con el fin de propiciar su incorporación al mercado mexicano, explicó.

Las dos primeras estuvieron orientadas a empresas medianas, especialistas para extraer o explotar petróleo en aguas someras; la tercera para pequeñas y medianas empresas, por tratarse de campos maduros que en su momento explotó Pemex y en los que quedan remanentes de petróleo que se pueden aprovechar.

Reconfiguración en Tula

El titular de Energía dio a conocer que en su última sesión, el consejo de administración de Petróleos Mexicanos autorizó un programa para la reconfiguración de la refinería de Tula, con el fin de que en esas instalaciones sean producidos combustibles de ultrabajo contenido de azufre, que son menos contaminantes. En cuestión de dos a tres años ya se podrá producir ese tipo de combustible.

Anticipó que el consejo de administración de Pemex negocia con fondos de inversión internacionales la posibilidad de obtener créditos para la reconfiguración de otras refinerías, con el fin de aumentar la oferta propia de gasolina con bajo contenido de azufre.

CFE negociará pensiones

En el mismo foro, Enrique Ochoa Reza, director de la Comisión Federal de Electricidad (CFE), dio a conocer que la empresa buscará el próximo año introducir en la negociación de su contrato colectivo de trabajo una forma de reducir el costo que representa el pago de las pensiones de los trabajadores de la compañía, que representan un pasivo de 591 mil millones de pesos.

El pasivo laboral representado por el costo de las pensiones de los trabajadores de la CFE significa para la compañía un serio problema para su estabilidad financiera, dijo Ochoa Reza.

En mayo, cuando la CFE y el Sindicato de Trabajadores Electricistas de la República Mexicana negocien los términos del contrato colectivo de trabajo, como ocurre cada dos años, se planteará un acuerdo para reducir el pasivo laboral, dijo el funcionario.

La negociación incluirá mecanismos de incentivos para que los trabajadores y empleados de la empresa eléctrica acepten transitar hacia un nuevo esquema laboral que reduzca el costo que hoy enfrenta la CFE para cubrir las obligaciones pensionarias.