A instancias de empresas interesadas, la Secretaría de Energía (Sener) aceptó ampliar en casi una tercera parte las áreas de exploración y explotación petrolera susceptibles de licitarse a partir del año entrante. El mayor interés mostrado por los particulares se ubica en la región marina fronteriza del Golfo de México, conocida como área plegado de Perdido de aguas profundas, y en la región Tampico-Misantla para recursos no convencionales.

Así se dio a conocer en la presentación del Plan Quinquenal de Exploración y Extracción de Recursos Petroleros 2015-2019, donde la subsecretaria de Hidrocarburos, Lourdes Melgar Palacios, precisó que el programa considera un total de 235 mil kilómetros cuadrados, cifra que involucra un incremento de 56 mil 515 kilómetros cuadrados más a los originalmente previstos por la Secretaría de Energía, equivalente a 32 por ciento más, y se conformarán 96 áreas de exploración y 237 campos de extracción.

Con esto, alrededor de 12 por ciento del territorio nacional será susceptible de licitarse con fines petroleros en el primer plan de exploración y extracción producto de la reforma energética y se concursarán bloques con posibles yacimientos con recursos que alcanzarían cerca de 105 mil millones de barriles de petróleo crudo equivalente.

Sobre el plan quinquenal, el secretario de Energía, Pedro Joaquín Coldwell, informó que en el proceso para su elaboración 12 empresas propusieron áreas que pueden resultar de su interés para la exploración o extracción, con vistas a que sean incluidas en futuros procesos licitatorios y que, entre otras novedades e ideas aceptadas, se encuentra la propuesta de que las áreas contractuales a licitar resulten contiguas para que los ganadores de los concursos puedan aprovechar una infraestructura común y reducir costos de operación. “Además, se determinó que los bloques fueran de mayor tamaño a los de las convocatorias iniciales (de la ronda uno) y que cada uno se definiera según las características geológicas y técnicas específicas. De igual modo se modificó el orden en que se habían programado las licitaciones de algunos bloques, de acuerdo con las condiciones del mercado internacional de crudo, las posibilidades de inversión de las empresas y la disponibilidad y calidad de la información sismica”, dijo el funcionario.

Joaquín Coldwell también puntualizó que el Plan Quinquenal de Exploración y Explotación de hidrocarburos se revisará durante el tercer trimestre de cada año y la Secretaría de Energía podrá proponer cambios y adiciones conforme a la información que se vaya generando, las experiencias que se obtengan tras cada una de las rondas de licitaciones y las condiciones coyunturales que se presenten en el mercado internacional.

En todos los casos, afirmó, como se ha hecho en las licitaciones anteriores, el Estado obtendrá al menos 70 por ciento de las utilidades que las empresas obtengan.

Con el plan, dijo, se busca que la política energética adquiera un enfoque integral y participativo, que dé respuesta tanto a los requerimientos de las compañías, como a los intereses e inquietudes de la sociedad en general, de dependencias y gobiernos locales, así como de expertos y académicos.

Adelantó que a partir de la ronda dos se licitarán primero las áreas más cercanas a las costas y, posteriormente, las que estén en zonas más alejadas, donde el tirante de agua es mayor y se requiere tecnología más especializada para aprovechar los yacimientos, y al final se lanzarán a concurso aquellos bloques con tirantes de agua de más de 3 mil 500 metros de profundidad.