La comisión de minisalarios incumple con su propósito, insisten académicos y sindicatos
Lunes 14 de septiembre de 2015, p. 19
Mientras sindicatos de diversas corrientes e instancias de investigadores –como el Observatorio del Salario Mínimo de la Universidad Iberoamericana de Puebla– se han pronunciado por la desaparición de la Comisión Nacional de Salarios Mínimos (Conasami) por inoperante
, a la dependencia se le proyecta un presupuesto de 37 millones de pesos 741 mil pesos para 2016.
De este monto, 8 millones 186 mil pesos serán para el pago de salarios al personal permanente; y 528 mil a los transitorios. Además están presupuestados 12 millones 468 mil pesos para el pago de otras prestaciones sociales y económicas
para trabajadores y funcionarios de la dependencia.
El documento oficial del Presupuesto de Egresos para 2016 da cuenta de dichas cifras y detalla que, además, se destinará un monto de un millón 809 mil pesos para el pago de estímulos a servidores públicos
de la Conasami.
Un rubro más es el referente a pagos de remuneraciones adicionales y especiales
para el personal de esta dependencia, el cual asciende a un millón 453 mil pesos, entre otros renglones.
Del total de la partida destinada a esta comisión, 28 millones 970 mil pesos serán para el pago de servicios personales, es decir, 76.8 por ciento de los recursos que recibirá.
Paga por honorarios
Al respecto, el Observatorio de Salarios Mínimos asienta en su informe más reciente que la Conasami, además de que incumple con su cometido central que es tutelar el derecho a un salario digno de los trabajadores, tampoco desempeña funciones que tiene encomendadas por la Ley Federal del Trabajo y no lleva a cabo tareas como la elaboración de estudios sobre salarios, condiciones laborales y situación económica, ya que la mayor parte de éstos los desarrollan especialistas a los que les paga por honorarios.
Cuestiona ese Observatorio la tarea de la comisión y añade que, lejos de velar por los intereses de los trabajadores, ha servido de dique contra la recuperación de los salarios en el país. Otra organización que demanda la desaparición de la dependencia es la Unión Nacional de Trabajadores (UNT), cuyos sindicatos firmaron un posicionamiento sobre la urgente recuperación de los ingresos de los trabajadores, en el que señalan que la Conasami no tiene razón de ser, dado que los salarios llevan cuatro décadas de perder su poder de compra, y el aumento a los mínimos es más un techo para todas las revisiones contractuales.
Cabe referir que la Conasami depende de la partida global de la Secretaría del Trabajo, la cual según el Presupuesto de Egresos, en 2016 manejará recursos por 4 mil 674 millones de pesos, 11.4 por ciento menos que en 2015. De dicho monto, mil 972 millones serán para el pago de servicios personales.
De las instancias que dependen de la STPS, en el presupuesto se indica que a la Junta Federal de Conciliación y Arbitraje se canalizarán 907 millones de pesos, que se desglosan de la siguiente manera: para el pago de salarios al personal permanente 176 millones; para los transitorios 101 millones; para remuneraciones adicionales y especiales 30 millones; para el pago de otras prestaciones sociales y económicas
al personal, 303 millones y otros 5.6 millones para el pago de estímulos a servidores públicos
.
A la vez, la Coordinación del Servicio Nacional de Empleo, le costará a la dependencia 2 mil 26 millones de pesos el próximo año, y la Procuraduría de la Defensa del Trabajo, 190 millones.
En tanto, algunas delegaciones federales del trabajo tienen presupuestos altos, como las delegaciones de Jalisco y Coahuila, la primera tendrá 25.8 millones de pesos y la segunda 24 millones; mientras Campeche recibirá 12.3 y Chihuahua 17.8 millones, entre otros.