Nuevo episodio de violencia horas antes del comienzo del Año Nuevo judío; 2 detenidos
Lunes 14 de septiembre de 2015, p. 25
Jerusalén.
La policía israelí se enfrentó este domingo con palestinos en la mezquita de Al Aqsa, en la Explanada de las Mezquitas, este de Jerusalén, horas antes del inicio del Año Nuevo judío, con saldo de 20 heridos, en el más reciente episodio de violencia ocasionado por el acceso a este lugar sagrado para ambas religiones, que se encuentra en la parte palestina ocupada por Israel desde 1967.
El presidente palestino, Mahmoud Abbas, condenó el ataque, mientras el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, dijo que las autoridades debían evitar disturbios en el complejo.
Los choques ocurrieron después de que la semana pasada el ministro israelí de Defensa, Moshe Yaalon, firmó una declaración en la que consideró ilegal la actividad de los murabitún, grupos musulmanes que suelen increpar a los judíos que visitan el lugar sagrado. Esta orden generó mayor tensión en este punto de la Vieja Jerusalén.
Según testigos musulmanes, la policía de Israel irrumpió en el recinto a las 6:45 con el argumento de que jóvenes palestinos se habían atrincherado en la mezquita de Al Aqsa durante la noche del sábado con el objetivo de perturbar las visitas por el inicio de las celebraciones del Año Nuevo judío, este domingo por la noche.
En ese momento palestinos con el rostro cubierto entraron en la mezquita y empezaron a lanzar piedras y ladrillos contra los agentes. Al menos dos palestinos fueron arrestados.
La policía israelí aseguró que se encontraron tubos en la entrada de la mezquita de Al Aqsa, que podían llevar explosivos caseros
.
Los choques entre palestinos y cuerpos policiacos continuaron en calles aledañas al templo. Policías israelís lanzaron gas lacrimógeno y granadas aturdidoras. La Media Luna Roja palestina reportó 20 heridos.
Entre los visitantes al lugar se encontraba el ministro de Cultura de Israel, Uri Ariel.