Con el corredor cultural Chaputepec lo que se busca es convertir un espacio vedado para los peatones, y en el que sólo se ve el paso de los automóviles, en un área de disfrute y convivencia no sólo para los vecinos de la zona, sino para todos los capitalinos, señaló Fausto Galván Escobar, coordinador de Gestión para el Crecimiento y Desarrollo de la Ciudad, de la Secretaría de Desarrollo Económico del Distrito Federal.

Por ello, dijo en entrevista, el eje principal del proyecto es la recuperación de un espacio público que se encuentra deteriorado con un concepto de calle completa que incluye la ampliación de banquetas y bicicarriles en beneficio de peatones y ciclistas.

Esa es la política pública que el jefe de Gobierno, Miguel Ángel Mancera, ha instruido: recuperar y rediseñar el espacio público para las familias. Lo que buscamos es que este espacio, que tiene una mala funcionalidad, sea recuperado y revitalizado, generar un destino vivo que siempre tenga actividad, que siempre tenga convivencia y donde se pueda ir reconstruyendo el tejido social, por lo que será incluyente y de accesibilidad universal, explicó.

El área a intervenir es de 1.3 kilómetros, de la glorieta Insurgentes a la calle Lieja, de los que aproximadamente 80 por ciento será espacio público para la recreación y convivencia de las familias. Por ello se prevé construir dos plazas públicas a la altura del acueducto y de la calle Sevilla, en las que la ampliación de las banquetas será de siete a 23 metros.

El funcionario señaló que la propuesta de crear un parque elevado sobre la avenida Chapultepec permitirá además contar con un nuevo espacio público de más de 61 mil metros, así como 9 mil metros de áreas verdes, que tendrá una vocación cultural con actividades gratuitas y en cuyo diseño podrán participar los ciudadanos.

Además de satisfacer la necesidad de un espacio público de calidad, permite a las personas disfrutar del entorno y tener áreas de recreación en un lugar seguro, donde las familias pueden convivir y disfrutar el espacio, añadió.

Galván Escobar subrayó que serán los vecinos quienes decidan si el proyecto se realiza a nivel de suelo o elevado, de allí que la consulta del próximo 26 de septiembre será vinculante, pero lo importante, agregó, es que este proyecto ha traído una conclusión que es unánime: hay que hacer algo con la avenida Chapultepec.

Aseguró que cualesquiera de las dos opciones significa beneficios para los ciudadanos, porque implican la recuperación del espacio. Tan sólo el ensanchamiento de las banquetas permitirá que hagan suyo ese espacio y revitalizará la economía de la zona.

Galván Escobar señaló que la avenida Chapultepec se encuentra deteriorada, con inmuebles abandonados, muchos de ellos afectados por el sismo de 1985; mientras el estacionamiento asignado a la Secretaría de Seguridad Pública local, aledaño a la glorieta Insurgentes, se encuentra subutilizado y donde hay indigentes y basura, además de que cruzar la avenida se vuelve muy riesgoso, pues son cruces muy largos.