Analistas advierten que es anticipado
Jueves 10 de septiembre de 2015, p. 5
La reducción en los ingresos por la exportación de petróleo, así como la liberación anticipada del precio de las gasolinas, propuesta por el gobierno para 2016, fueron identificados por analistas como riesgos para las finanzas públicas del año próximo.
Las finanzas públicas en 2016 se enfrentarán a aspectos coyunturales que impactarán su estabilidad, comentó este miércoles Pamela Díaz Loubet, analista de Ve por Más. La existencia de estos factores no solo dará un tinte de austeridad al gasto el año siguiente, sino que generará cambios relacionados con la menor dependencia de los ingresos públicos del petróleo y la reducción del déficit fiscal, añadió.
En el paquete económico el gobierno propone adelantar la liberación del precio de los combustibles, medida que no se tenía prevista hasta 2018. Según el planteamiento oficial, liberalizar el precio permitirá a las familias mexicanas contar con menores costos cuando, como ha ocurrido recientemente, se reduzca el precio internacional de los combustibles.
Asimismo, esta medida hará posible al gobierno federal estabilizar el ingreso de los impuestos asociados a los combustibles y en un futuro evitar que el Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS) de combustibles se torne negativo, lo que implica un subsidio que históricamente ha demostrado ser sumamente regresivo, dado que es una transferencia que beneficia primordialmente a los deciles con mayores ingresos de la población.
La propuesta, en caso de aprobarse, significa que el precio de la gasolina fluctuaría entre bandas prestablecidas por el gobierno. De prosperar en el Congreso, agregó Díaz, la medida puede traer implicaciones sobre la recaudación del IEPS de la gasolina, en caso de que el precio siga a la baja. Por otro lado, tendría un efecto favorable en la inflación.
Tres fueron los riesgos identificados por la analista respecto del paquete económico de 2016: primero, menor crecimiento económico derivado de una baja en la actividad en Estados Unidos, principal destino de las exportaciones mexicanas, así como en el precio de las materias primas. De ser así, planteó, el impacto sería negativo sobre los ingresos tributarios.
Segundo, la caída acentuada en el precio de la gasolina (el gobierno importa la mitad de la que se consume en el país). Ante la propuesta de liberación, la tendencia a la baja del precio de gasolina podría tener implicaciones en materia de ingresos fiscales, dado que implicaría una menor recaudación del IEPS.Finalmente, el tercer riesgo está relacionado con la posibilidad de tasas de interés mayores, a partir del esperado inicio de ciclo alcista en Estados Unidos y México, que aunque se prevé moderado aumentará el costo de la deuda externa e interna.