Plantea experto deducir prestaciones laborales y reducir el ISR
Domingo 30 de agosto de 2015, p. 21
Torreón, Coa.
El gobierno federal no tendrá otra salida que hacer un recorte de 50 mil millones de pesos adicionales a la disminución de 135 mil millones anunciados en marzo para el presupuesto público del próximo año, estimó el director general del Instituto para el Desarrollo Industrial (Idic), José Luis de la Cruz Gallegos.
El analista consideró que para afrontar la volatilidad internacional que prevalecerá en 2016, deberán aplicarse una serie de cambios fiscales como ampliar la deducibilidad a las prestaciones laborales y reducir entre 2 y 3 puntos porcentuales la actual tasa del impuesto sobre la renta (ISR), con miras a impulsar la generación de empleos y la inversión.
Durante su participación en la Convención Nacional de Delegaciones, Sectores y Ramas Industriales 2015 de la Canacintra, dijo que una de las prioridades que se deben tener en la elaboración del presupuesto base cero es no castigar las áreas que generan crecimiento económico, pues señaló que un error que cometió el gobierno durante las décadas de los 80, 90 e incluso en 2008 es que se castigó la inversión productiva, lo cual en este escenario sería un problema.
Agregó que es indispensable que el gobierno federal garantice la eficacia en el ejercicio del presupuesto, es decir que éste se ejerza en tiempo y forma y que se le pague a tiempo a los proveedores, así como que se busque a través del gasto público favorecer el contenido nacional.
Ejemplificó que en el caso del sector energético no existen restricciones ni en la legislación nacional ni en los tratados internacionales firmados por México para que en el ejercicio que hacen Petróleos Mexicanos (Pemex) y la Comisión Federal de Electricidad (CFE) para favorecer el contenido nacional, lo cual representa una área de oportunidad.
Señaló que también existe la posibilidad de generar un entorno fiscal más propicio para la inversión, pues al haber un recorte en el presupuesto público el crecimiento económico va a quedar en función de la inversión privada, por lo que debe haber un entorno fiscal propicio.
Ante empresarios afiliados a la Cancintra, De la Cruz resaltó la importancia de que desde el inicio se haga un escenario macroeconómico objetivo y realista, en el cual se tome en cuenta el precio del petróleo, el tipo de cambio y sobre todo en términos de crecimiento económico.
Si se sale con un escenario demasiado optimista que no sea real el castigo va a ser para el propio gobierno con una menor recaudación
, adelantó
El también presidente de la comisión de economía de la Confederación de Cámaras Industriales (Concamin) expuso que el gobierno tiene la oportunidad, a través del presupuesto base cero, de hacer lo que se tuvo que aplicar no con la reforma fiscal sino con la reforma hacendaria, es decir, un ajuste no sólo para tener ingresos sino para restringir los gastos, principalmente en operación.
Está restringido en pensiones, sueldos y salarios, en la inversión sería delicado que lo afectara (pero) en el gasto de operación sí tienen margen para hacerlo más eficaz y transparente.
Indicó que el escenario mundial es mucho más delicado de lo que se había planteado, mientras que las reformas estructurales no tienen el perfil para afrontar esta coyuntura de mucha volatilidad en el tipo de cambio, las caídas en los precios del petróleo y un entorno financiero bursátil más complicado.