Ni modo, hacer elecciones es caro y nunca he dicho que la reforma electoral abaratará los costos de los comicios, respondió el consejero Lorenzo Córdova a los críticos del monto presupuestal solicitado por el Instituto Nacional Electoral (INE) para 2016.

Mañana el Consejo General del INE votará un proyecto de presupuesto de 11 mil 442 millones de pesos para el instituto y de 4 mil 31 millones de pesos en prerrogativas para los partidos, lo que fue calificado por algunas agrupaciones políticas como obeso y sin considerar el contexto económico del país.

El presupuesto no se puede ver en abstracto y no es comparable con otras partidas, de una institución que acaba de nacer, tiene nuevas atribuciones y que, ni modo, hacer elecciones es caro, expresó el consejero presidente del INE.

Aclaró que nunca ha dicho que una reforma que apostaba a un incremento de 73 atribuciones iba a abaratar el costo del INE.

Después de firmar un convenio de colaboración con la Universidad Autónoma de Guerrero, pidió que se pondere que el INE no es el IFE. Este instituto cambió radicalmente, porque todos los años estará a cargo de procesos electorales.

Para justificar su petición presupuestal, dijo que una elección local implica prácticamente la misma logística que supone una federal: instalar consejos locales y distritales, contratar capacitadores y asistentes electorales, la insaculación de 13 por ciento del padrón electoral y la instalación de casillas.

Defendió que el INE haya solicitado más de 700 millones de pesos para la construcción de un edificio cuando una cantidad similar no se ha ejercido este año. Ese tema será decisión de la Cámara de Diputados, resaltó.

Según Córdova, contuvieron los aumentos salariales y sólo se planea incrementar 5 por ciento al personal con ingresos más bajos, 3 por ciento a técnicos y con cargos intermedios y uno por ciento a los de altos ingresos. Los consejeros por quinto o sexto año consecutivo no recibirán aumento, lo que calificó de justo.

Gasto desproporcionado: contralor

El Consejo General analizará hoy el informe del contralor interno del INE, Gregorio Guerrero, donde plantea que el establecimiento de nuevas atribuciones no debe impedir que se corrijan aspectos como las duplicidades; evaluar cargas de trabajo; simplificar el tabulador de puestos y anteponer criterios de capacidad y habilidades a la antigüedad, filias y afectos.

Tampoco debe impedir la fusión de departamentos; la regularización de las plazas comisionadas; homologación de funciones y en términos generales una nueva organización de diversas áreas del INE, añade.

Bajo ninguna lógica resulta admisible que se pretenda con el discurso de la reforma electoral y las nuevas atribuciones soslayar dicha situación, permanecer en esta inercia de no hacer nada o, peor aún, convertirla en patente de corso que permita continuar desproporcionando las dimensiones y el gasto del INE ante las muchas necesidades nacionales, refiere.

El costo de la estructura ocupacional es el principal elemento de presión de gasto y constituye el mayor obstáculo para reducir el presupuesto del INE, concluye el informe.