El cuerpo del arqueólogo fue colgado en una columna romana de Homs
Desde hace un mes era prisionero de los yihadistas que tomaron la ciudad
Jueves 20 de agosto de 2015, p. 25
Beirut.
El Estado Islámico (EI, también conocido como Isil) decapitó a Jaled Asaad, ex director de antigüedades de la milenaria ciudad de Palmira y uno de los arqueólogos más destacados de Siria, tres meses después de que los yihadistas tomaron esa localidad, que alberga uno de los sitios arqueológicos más famosos del mundo.
El Fondo de Naciones Unidas para la Educación y la Cultura condenó el asesinato de Asaad a manos del EI, que hace más de un año proclamó un califato en amplias zonas de Siria e Irak.
Asaad, de 82 años, fue decapitado este martes en una plaza frente el museo de la ciudad, en la provincia de Homs, ante la mirada de decenas de personas, y su cuerpo fue colgado después de una de las columnas romanas, informó Mamun Abdulkarim, director del Departamento de Museos y Antigüedades en Damasco, que calificó como trágica
la muerte del prestigiado arqueólogo.
El opositor Observatorio Sirio para los Derechos Humanos (OSDH), con sede en Londres y que cuenta con una red de activistas en Siria, dijo que al arqueólogo le pegaron un cartel en el que los yihadistas lo acusaban de ser partidario del gobierno por haberlo representado en conferencias en el extranjero junto con infieles, y de ser el director de los ídolos
de Palmira.
Los combatientes del EI –que ha impuesto una violenta interpretación de la ley islámica o sharia y cree que las antigüedades promueven la idolatría– intentaron que Asaad les diera información sobre el lugar donde fueron escondidos algunos de los tesoros de Palmira para salvarlos tras la toma de la ciudad, agregó Abdulkarim.
El arqueólogo fue tomado prisionero hace un mes tras negarse a abandonar la ciudad cuando cayó en manos de los yihadistas, el 21 de mayo, pero antes, él y miembros de su familia lograron resguardar unas 400 piezas antiguas.
Desde entonces impera la preocupación de que los extremistas puedan devastar los restos romanos de 2 mil años de antigüedad, como han hecho en Irak con numerosos lugares arqueológicos, toda vez que hace dos meses destruyeron una estatua que representa a un león, dijo Abdulkarim.
En el campo de refugiados de Yarmuk, en Siria, asediado por el EI, un brote de fiebre tifoidea afecta a los palestinos, informó la Organización de Naciones Unidas, que teme otras enfermedades si no llega ayuda al lugar.