Si bien una encuesta aplicada a un millón de personas beneficiarias de la Cruzada Nacional contra el Hambre en 400 municipios indica que en ese sector poblacional se redujo la pobreza extrema y las carencias sociales, el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval) sostiene que se debe lograr una reducción de la pobreza más amplia que involucra a 55 millones de personas.

El Coneval divulgó ayer el estudio Resultados intermedios de la Cruzada Nacional contra el Hambre, que incluye una encuesta a un millón de personas de 207 mil hogares, así como un reporte de cinco municipios en pobreza extrema.

El documento indicó que todas las carencias sociales se redujeron entre 2013-2014 y 2015. Entre ellas, es importante resaltar las disminuciones en las carencias por acceso a los servicios de salud y por acceso a la alimentación.

Detalló que en la población objeto de estudio de la encuesta en los 400 municipios la carencia por acceso a los servicios de salud pasó de 32.9 por ciento entre 2013 y 2014 a 9.2 en 2015. Por su parte, la carencia por acceso a la alimentación pasó de 100 a 42.5 por ciento en este grupo de personas.

Sin embargo, precisó que los resultados del estudio no pueden ser generalizados a la totalidad de la población residente en localidades o municipios donde opera la cruzada, ya que la información recabada por la encuesta sólo corresponde a la población directamente beneficiaria de los programas.

Minutos después de que el Coneval divulgó el estudio, la titular de la Secretaría de Desarrollo Social, Rosario Robles, y el vocero del Gobierno de la República, Eduardo Sánchez, dieron una conferencia de prensa en la que la primera señaló que nadie puede regatear lo que ha hecho la cruzada, pues su focalización ha permitido reducir la carencia alimentaria. Apuntó que la gran apuesta tiene que ver con más crecimiento económico y más empleos para los mexicanos.

Eduardo Sánchez destacó que en el universo analizado, 57 por ciento de la población atendida no vive en carencia alimentaria, siete de cada 10 personas tienen servicios de salud, y bajaron otras carencias, además de que mejoró la calidad en viviendas de la población.

El Coneval señaló en el estudio que reducir la pobreza tiene que ver con esquemas que mejoren la actividad económica del país en su conjunto, estrategias que beneficien los salarios reales, la productividad, la inversión y la estabilidad de los precios para generar un incremento sostenido del poder.

Explicó que además de la encuesta a los 207 mil hogares incluidos en la cruzada, se analizaron los indicadores de los municipios Zinacantán, Chiapas; Guachochi, Chihuahua; San Felipe del Progreso, estado de México; Mártir de Cuilapan, Guerrero, y Tehuacán, Puebla, que también están dentro de la cruzada. En todos ellos las cifras sugieren reducción de pobreza extrema y avances en el acceso a carencias sociales.

Agregó que aunque estos avances son importantes es indispensable preguntarse si es posible escalar a nivel nacional y con la misma intensidad los mecanismos de identificación de los hogares para llegar a una mayor precisión de las acciones y recursos que forman parte de la cruzada.

Apunta que la información disponible sólo permite conocer una parte de los resultados de la cruzada, por lo que se planea continuar con más análisis.

Al final, Robles consideró que en el Presupuesto de Egresos del próximo año, tanto el presidente Enrique Peña Nieto como la Secretaría de Hacienda tienen claridad de que los programas sociales son prioritarios, y se ha trabajado en evitar duplicidades, poner a todos en una misma bolsa, y que haya mayor eficacia.