Organizaciones de defensa de los derechos humanos y del territorio exigieron la libertad inmediata de Marco Antonio Suástegui, vocero del Consejo de Ejidos y Comunidades Opositores a la presa La Parota (Cecop), preso en el penal La Unión, Guerrero, acusado de robo agravado, lesiones agravadas y simples, despojo y ataques a la vías de comunicación.

En conferencia de prensa en la ciudad de México, denunciaron que el activista fue detenido sin orden de aprehensión, fue víctima de tortura y ha recibido amenazas de muerte.

Suástegui fue aprehendido en Acapulco el 17 de junio de 2014 y encarcelado en un penal de máxima seguridad en Tepic, Nayarit. Ahí permaneció hasta marzo de este año, cuando fue trasladado a la cárcel estatal La Unión.

El pasado miércoles, Suástegui recibió la visita de integrantes de la Red Todos los Derechos para Todas y Todos (RTDT), Espacio de Organizaciones Civiles por los Derechos Económicos Sociales y Culturales (Espacio Desc), entre otras organizaciones no gubernamentales.

Lo golpearon y le arrancaron uñas

En el encuentro les relató que desde el día que lo arrestaron fue sometido a tratos inhumanos y degradantes por los agentes que lo detuvieron, lo golpearon y le arrancaron tres uñas de los pies.

Silvia Emmanuelli, de Espacio Desc, aseguró: Cuando estuvo recluido en Nayarit le daban una taza de té por la mañana, tres tortillas a la hora de la comida y verduras por la noche. No tenía acceso a agua potable, por lo que sufrió problemas intestinales.

Ahora, en el penal La Unión, Suástegui se recupera de los graves excesos que sufrió en Nayarit, señaló Fernando Ríos Martínez, secretario ejecutivo de la RTDT.

Emanuelli reveló que el pasado 31 de julio Suástegui recibió una carta anónima con amenazas de muerte. Con la misiva intentan vislumbrar conflictos familiares que pudiera justificar un ataque contra el líder histórico de la Cecop.

No hay que olvidar que Marco Antonio está encarcelado porque el gobierno estatal intenta imponer la presa La Parota, enfatizó.

Este viernes, un tribunal debía resolver si era culpable de robo agravado, pero una magistrada se excusó del caso con el argumento de que ella participó en movimientos sociales. Fijó un nuevo plazo de 10 días hábiles para pronunciarse al respecto.

En Acapulco, Vicente Suástegui manifestó: El tribunal (Superior de Justicia) se burló de nosotros; obstaculizó la liberación de mi hermano Marco.

(Con información de Héctor Briseño)