Washington.

El multimillonario Donald Trump, aspirante a la candidatura presidencial del Partido Republicano, se negó este domingo a ofrecer disculpas por un comentario misógino contra la periodista Megyn Kelly, de la cadena conservadora Fox News, e insistió en que fue mal interpretado.

Trump propició una escandalosa polémica cuando el viernes pasado declaró que Kelly, moderadora del debate entre los principales aspirantes republicanos el jueves por la noche, fue dura con él porque estaba menstruando.

La interrogante de Kelly fue sobre sus comentarios ofensivos y denigrantes de las mujeres, algo que ha marcado las declaraciones públicas del magnate –presidente de la empresa organizadora de Miss Universo–, hasta el punto en que alguna vez fue duramente criticado cuando en marzo de 2006 declaró: invitaría a salir a mi hija (de 24 años), si no fuera el padre.

El viernes pasado, en una entrevista con la cadena de noticias CNN, Trump dijo impaciente y exasperado sobre Kelly: se podía ver sangre saliendo de sus ojos, sangre saliendo de su... de donde sea.

Este domingo, en una nueva comunicación con CNN, Trump sostuvo que solamente gente enferma o pervertida podría deducir que estaba hablando del periodo menstrual de Kelly.

Estimo a las mujeres. Quiero ayudarlas, sostuvo Trump en entrevista telefónica difundida en el programa State of the Union.

Pero cuando el conductor de State of the Union le preguntó cómo sus compañeros candidatos y los comentaristas de Fox News habían llegado a esa conclusión, Trump respondió: Quieren ser políticamente correctos. Quieren conseguir puntos.

La crítica más dura provino de la única mujer que busca la candidatura republicana, Carly Fiorina, ex ejecutiva de Hewlett-Packard, quien dijo que la reacción de Trump es una prueba de su impaciencia y si le resulta insoportable una pregunta, imaginen su reacción ante la presión que enfrentaría en el despacho presidencial.

El empresario va al frente de las encuestas entre los 17 aspirantes a la candidatura republicana.