Los Ángeles.

Salma Hayek dice que aunque los estudios de Hollywood ya no la buscan tanto, se ha mantenido muy ocupada.

Creo que no me quieren, pero en realidad no me importa, afirmó la actriz mexicana postulada a un Óscar.

Hayek produjo y prestó su voz a la adaptación animada de El profeta, libro de poesía del escritor libanés Jalil Gibrán, de 1923. Es un proyecto que se estrenará en Estados Unidos el 7 de agosto y la actriz dijo que estuvo parcialmente inspirado en su hija de 7 años, Valentina Pinault.

Es significativo. Es esperanzador. Es inspirador. Es respetuoso. Honra a los niños, señaló Hayek en una entrevista en la que habló en inglés. “Mucha gente me dice ‘Pero no les va a gustar la poesía’. A los niños les encanta, por eso tenemos las canciones de cuna y luego ya no se las damos más. Es su primera lengua. Ellos piensan en metáfora”.

Hayek ya no figura tanto como antes en las alfombras rojas del espectáculo. Aseguró que ha estado muy ocupada en actos de beneficencia.

He recibido premios de distintos lugares por el trabajo humanitario y he estado en muchas películas. También está mi esposo (Francois-Henri Pinault), que me lleva a muchos lugares... He estado muy ocupada con la vida.

Ataviada en un vestido de rayas de Gucci, próxima a cumplir 49 años, afirmó que los 40 han sido una maravillosa aventura.