Washington. Hace un año, un pequeño robot autoestopista fue lanzado a la carretera para recorrer Norteamérica de aventón, para descubrir si los humanos son dignos de confianza. La respuesta llegó este fin de semana, cuando el aparato apareció desmembrado por vándalos. El humanoide parlante fue creado en Canadá como experimento social. Después de muchos aventones exitosos, fue desmantelado y abandonado al borde de una ruta en Filadelfia. Oh, no. Mi cuerpo se ha dañado, escribió el robot en su página de Internet durante el fin de semana. Los investigadores de la Universidad Ryerson de Toronto que idearon el experimento dijeron: “Sabemos que muchos fans de hitchBOT se van a sentir decepcionados, pero el experimento no ha terminado. Diremos qué hemos aprendido de la experiencia y exploraremos futuras aventuras para robots y humanos”, escribieron en www.hitchBot.me.