Vecinos y taxistas del Peñón de los Baños destrozaron al menos cuatro vehículos que prestan servicio a Uber, así como de particulares, mientras a los conductores les lanzaron harina y huevos.

La manifestación convocada por el Movimiento Social Benito Juárez, para protestar en contra de la ocupación ilegal de sus calles por vehículos BMW, Mercedes Benz, Audi y Jetta de reciente modelo, derivó en actos violentos, incluso contra conductores que esperaban la llegada de sus familiares al Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México.

Con piedras y tubos, un grupo de jóvenes, algunos con la cabeza y el rostro cubiertos, arremetió contra cuatro vehículos estacionados en la calle Hidalgo, obligando a los conductores a escapar de las unidades y avisar a sus compañeros que abandonaran la zona.

Los más cercanos lograron llegar al Circuito Interior, mientras otros intentaron cruzarlo hacia el carril norte-sur, pero fueron alcanzados por un grupo de manifestantes que les arrojó huevos y harina.

Otros conductores se quedaron y tuvieron que identificarse para demostrar que no pertenecían a Uber, a fin de evitar que sus vehículos fueran dañados, aunque no se salvaron de que les arrojaran huevos y harina.

Antonio Gómez Barajas, dirigente de Movimiento Social, denunció que la omisión de las autoridades capitalinas ha permitido que los vehículos de Uber, que, dijo, significan una competencia desleal que ha disminuido los ingresos de las familias de la colonia hasta 50 por ciento, se estacionen en Hidalgo, Texcoco, Tahel, Cuatro Soles y Oriente 137, que son las cinco calles principales de la colonia.

Su presencia ha aumentado sin que nadie los moleste, mientras a nosotros nos multan o remiten al corralón por ocupar un cajón más de los cinco autorizados, por los que pagamos, quitándonos pasaje del aeropuerto y zonas aledañas.

Los operadores de las cinco bases de taxis autorizadas, ubicadas en las calles Monterrey, Irapuato, Hidalgo, Texcoco y Morelos han visto caer sus ingresos irremediablemente, porque también prestan servicio de manera directa, lo cual es mucho más irregular, afirmó.

Además, los conductores que manejan esos vehículos de lujo hacen sus necesidades fisiológicas en el quiosco y molestan a las mujeres que por ahí transitan, cuando aquí todos somos como una familia; todos nos conocemos y no vamos a permitir esa situación.

Comentó que dichas unidades pueden cargar sin problemas pasaje en el aeropuerto con el permiso del comandante Arroyo, de la Policía Federal, a quien le entregan una cuota mensual, cuando para nosotros está prohibido, y si nos atrevemos, hasta el carro estamos perdiendo.

Uber México calificó los hechos de “ataque a la libertad y al derecho de todos de ganarse la vida de manera digna, perpetrado por unos cuantos que decidieron tomar la ruta de la violencia, acto absolutamente injustificable.

“Todos –señaló en un comunicado– tenemos el derecho a decidir libremente cómo nos trasladamos por la ciudad de manera segura y confiable, por lo que sucesos como éste son completamente inaceptables”.