Madrid.

La Federación Española de Futbol (FEF), el Barcelona y el Athletic de Bilbao serán sancionados por la atronadora pitada al himno español y al rey Felipe VI durante la final de copa que enfrentó a ambos equipos el pasado 30 de mayo en el Camp Nou, aunque el estadio azulgrana no será castigado con veto.

Tras una reunión de más de dos horas en la sede del Consejo Superior de Deportes (CSD), el secretario de Estado de Seguridad, Francisco Martínez, y el presidente del CSD, Miguel Cardenal, anunciaron una propuesta de sanción de 123 mil euros (136 mil 500 dólares) para la federación española, organizadora del partido, y 66 mil euros para el Barcelona, anfitrión de la final.

Asimismo, se propuso una multa de 18 mil euros para el Athletic de Bilbao, 100 mil euros para la plataforma independentista Catalunya Acció –promotora de la pitada– y 70 mil euros para otras asociaciones de índole similar.

Finalmente, la Comisión Antiviolencia, órgano encargado de la seguridad en el deporte en España, decidió no cerrar el estadio azulgrana, como había barajado la prensa española.

Dicho organismo precisó que sólo 6 mil euros de la multa al Barcelona corresponden a la pitada, que alcanzó los 119 decibelios, y que el resto de la sanción se debe a problemas relacionados con la seguridad del encuentro.

El Barcelona se alzó con el título tras derrotar 3-1 al Athletic.