Aguascalientes, Ags.

El juzgado primero de distrito con sede en esta ciudad concedió el beneficio de la libertad provisional bajo caución al ex gobernador del estado Luis Armando Reynoso Femat, a quien se le sigue como implicado la causa penal 39/2015 por el presunto delito de defraudación fiscal, informó el Consejo de la Judicatura Federal.

Una vez desahogada la diligencia de la declaración preparatoria, el juzgado le fijó una fianza de 50 mil pesos, y 7 millones 792 mil 288 pesos con 29 centavos para garantizar la reparación del daño generado al fisco federal.

Se espera que a más tardar este sábado quede en libertad, una vez que cubra los montos mencionados, informó su abogado, Julio Serna Ventrura.

Argumentó que el delito imputado de defraudación fiscal equiparable, previsto en el artícu­lo 109, fracción V, y sancionado por el artículo 108, fracción III, del Código Fiscal de la Federación –en la modalidad de omitir presentar por más de 12 meses las declaraciones de un ejercicio fiscal que exijan las leyes fiscales y dejado de pagar la contribución correspondiente–, no está considerado como grave en el artículo 194 del Código Federal de Procedimientos Penales.

Lo anterior se dio no obstante la oposición de la representación social de la Federación durante el desarrollo de la declaración preparatoria, fundada en lo dispuesto por el artículo 399 bis, fracción II, del Código Federal de Procedimientos Penales, aduciendo que Reynoso Femat se encuentra sujeto a otros procesos penales, en los cuales ya se le dictó auto de formal prisión por delitos de igual género que el que ahora origina la presente causa penal.

Las causas penales que se le siguen en el fuero común son por el delito de peculado y ejercicio indebido del servicio público. Durantre la audiencia, Reynoso Femat se notaba agotado (padece diabetes) y vestía el uniforme de la prisión en color beige.

El político panista fue aprehendido el mediodía del jueves cuando comía en un restaurante del hotel Crown Plaza en León, Guanajuato, debido a que durante 2009 el entonces gobernante ingresó a sus cuentas personales 213 millones de pesos pero sólo reportó a la Secretaría de Hacienda 184 millones, por lo que de los 29 millones de pesos restantes le fueron requeridos como pago de impuestos 7 millones 400 mil pesos.