Omar García, estudiante de la Normal Rural de Ayotzinapa irrumpió ayer en la celebración de la fiesta nacional de Francia con la consigna de Vivos se los llevaron, vivos los queremos. Su intención era hablar ante los asistentes, pero no pudo hacerlo.

Acompañado por elementos de seguridad salió del Club France, donde se efectuó el festejo y a cuyas puertas se encontraban padres de los 43 estudiantes desaparecidos. La finalidad de su protesta fue exigir al gobierno de Francia que durante la próxima visita de Estado del presidente Enrique Peña Nieto, haga un pronunciamiento en materia de derechos humanos.

Criticó que un país como Francia, donde se habla mucho de derechos humanos, tenga como invitado de honor en su fiesta nacional, que se realizará el 14 de julio, a un gobierno que no ha podido resolver un caso tan emblemático como el de Ayotzinapa.

En entrevista, explicó que la finalidad de hablar ante el público era para dar un mensaje sobre el caso de los normalistas desaparecidos y apelar al gobierno francés para que presione a las autoridades mexicanas por la falta de solución al problema.

El jóven irrumpió en el acto cuando la embajadora francesa, Maryse Bossière, ya había terminado su discurso. La diplomática diálogó brevemente con el normalista y luego éste se retiro. Trascendió que un funcionario de la representación diplomática recibió más tarde a los paterfamilias de los desaparecidos.

Julio César González, padre de César Manuel González, pidió que durante la visita de Peña Nieto al país galo se dé prioridad al tema de derechos humanos. Lo que pedimos nosotros es un pronunciamiento de Francia hacia el gobierno mexicano; que actúe conforme a derecho, subrayó.