La Habana.

Las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) anunciaron este miércoles un cese el fuego unilateral por un mes a partir del 20 de julio, día en que se celebra la independencia de su país, con el objetivo de bajar la tensión en las negociaciones que mantienen con el gobierno colombiano en La Habana, y en atención al llamado hecho el martes por los países garantes del proceso de paz.

Al inicio de una nueva jornada de diálogo, el jefe negociador de la delegación guerrillera, Luciano Marín, conocido también como Iván Márquez, declaró: Venimos a Cuba a alcanzar un acuerdo de paz, a poner fin a una guerra que sobrepasa el medio siglo. Nada puede complacernos más que acabar con la confrontación.

Valoramos el gesto de cese unilateral de fuego de las FARC, pero se necesita más, sobre todo compromisos concretos para acelerar las negociaciones, escribió el presidente Juan Manuel Santos en su cuenta de Twitter. Lo que queremos es terminar el conflicto lo más pronto posible, ¿y cómo lo terminamos? Acelerando las negociaciones, agregó.

Márquez, quien el martes agradeció el llamado de los garantes que acompañan el proceso de paz: Cuba, Noruega, Venezuela y Chile, aclaró que con su tregua la guerrilla busca generar condiciones favorables para avanzar con la contraparte en la concreción del cese al fuego bilateral y definitivo que facilite el diálogo de paz y reduzca la intensidad de las hostilidades.

La Organización de Naciones Unidas (ONU) calificó el anuncio de la guerrilla de un primer paso muy significativo hacia el desescalamiento de las hostilidades, y dijo que espera medidas recíprocas.

La guerrilla ya ha declarado treguas en varias ocasiones desde el comienzo de las negociaciones en Cuba, en noviembre de 2012. La última vez incluso fue de forma indefinida, en diciembre pasado, pero sólo duró hasta mayo, ya que fue levantada tras una serie de ataques militares en los que murieron unos 30 guerrilleros.

En tanto, al menos mil 200 integrantes de la comunidad Embera Eyabida abandonaron sus territorios en el municipio de Urrao, para ponerse a salvo de combates que se registran desde hace varios días entre militares y rebeldes de las FARC en el departamento de Antioquia, informó la Organización Indígena de esa localidad.