En su primera visita a Turín, insta a jóvenes a ir a contracorriente del mundo hedonista
mercancías
En Alemania, continúan manifestaciones en favor de refugiados de África y Medio Oriente
Lunes 22 de junio de 2015, p. 23
Turín.
El papa Francisco llamó a las naciones de Occidente a no tratar a los inmigrantes como si fueran mercancías
y denunció las conexiones mafiosas y la corrupción, este domingo en su primera visita a Turín, en el Piamonte, norte de Italia.
El espectáculo de los últimos días, de esos seres humanos tratados como si fueran mercancías, hace llorar
, dijo Jorge Mario Bergoglio al dirigirse a representantes del mundo del trabajo, en la Piazzetta Reale.
En momentos en que la Unión Europea se encuentra dividida respecto a su acogida, el Papa argentino condenó una vez más las manifestaciones de rechazo a los inmigrantes, en particular en el norte industrial italiano.
Si la inmigración aumenta la competencia (económica), no se puede culpar (a los migrantes) de ello, porque son víctimas de la injusticia, de la economía del rechazo y de las guerras. ¡Los seres humanos no deben ser tratados como mercancías!
, declaró.
En el momento más religioso de su visita, Francisco oró ante el Santo Sudario, una mortaja que habría envuelto el cuerpo de Jesucristo.
El pontífice se refirió a la situación en Italia: “No a la corrupción, que hoy es tan frecuente que parece haberse convertido en un comportamiento normal; no a las conexiones mafiosas, a las estafas, a los sobornos.
No a una economía del desecho
, agregó, luego de afirmar que actualmente se excluye rá-pidamente a quien no produce, siguiendo el modelo de usar y tirar
.
En Turín, “los excluidos que viven en la pobreza absoluta representan alrededor de 10 por ciento de la población. Se excluye a los niños –¡una tasa de natalidad cero!– a los ancianos, y ahora a los jóvenes: más de 40 por ciento de éstos no tienen empleo”, indicó.
El Papa cerró la jornada con un encuentro con miles de jóvenes en la plaza Vittorio Veneto de Turín. En respuesta a las preguntas de algunos de ellos, el pontífice los instó a ser castos
y a ir a contracorriente en este mundo hedonista
.
Las manifestaciones en favor de los inmigrantes continuaron en Europa. Unas 5 mil personas colocaron varios ataúdes frente al Reichstag, sede del parlamento de Alemania, para denunciar, simbólicamente, la muerte de los miles de refugiados provenientes Medio Oriente y África que pierden la vida en su intento de llegar a Europa.