El artista visual realizó un proyecto de campo expandido-escultura ambiente
Es paradójico, porque pidieron mi trabajo para salvarlo del deterioro, señala
Sobre un posible cambio de sede, dice: Mi filosofía es complementar, no destruir
Entre 2007 y 2008, Raymundo Sesma trabajó en el Centro Cultural Ollin Yoliztli para rescatarlo del desgaste y darle identidad
. Hoy lamenta el estado de deterioro en el que se encuentra el recinto
Lunes 22 de junio de 2015, p. 7
El artista visual Raymundo Sesma (Chiapas, 1954) lamenta la situación de deterioro en el que se encuentra el Centro Cultural Ollin Yoliztli, donde realizó entre 2007 y 2008 un proyecto de campo expandido-escultura ambiente.
En entrevista con La Jornada, el artista, quien vive y trabaja entre Milán y México desde 1980, señala que para él la obra del complejo cultural tiene un significado especial, porque ha sido publicada en diversos medios e incluso fue seleccionada para exhibirse en fotografías en el Museo del Palacio de Bellas Artes, en la exposición Arquitectura mexicana 1900-2015.
A Sesma le parece absurdo que el centro Ollin Yoliztli, incluida su obra, permanezca en el abandono, sobre todo cuando se trata de 10 mil metros cuadrados comisionados por la Secretaría de Cultura de la ciudad de México, que representa la institución dedicada a la preservación y fomento de la cultura, y el trabajo de creación, esfuerzo físico, humano y económico que significó.
Cuando se hizo el trabajo, me llamaron para salvarla de ese deterioro y darle identidad en su sentido paisajístico, y hoy es verdaderamente paradójico que la abandonen
, comenta el artista, cuya obra se encuentra en colecciones como las del Museo Metropolitano de Arte de Nueva York, el Museo de Victoria y Alberto de Londres, el Museo de Arte Moderno de México y el de Tokio, entre otros.
Subraya que para mantener en buen estado su obra entregó al director del Ollin Yoliztli de ese momento “todas las imágenes, muro por muro, con sus respectivos códigos de color, que le permitirían restaurar el edificio cuando llegara su momento.
Incluso, el proyecto que entregué iba más allá del Ollin Yoliztli, ya que también realicé un plan cromático para la parte habitacional que se encuentra a espaldas del conjunto. Proyecto que nunca se hizo, pero que ellos tienen en su poder. Esto significaba dignificar ese contexto degradado, por lo que no es simplemente un proyecto de carácter artístico, cromático o de paisaje; es también un proyecto social, que fue ignorado.
Sesma aclara que antes de iniciar un proyecto siempre toma en cuenta la función del espacio, luego su arquitectura en el sentido tridimensional y paisajístico, es decir, considera el contexto en que está situado el edificio.
Sobre la posibilidad de un cambio de sede del complejo cultural y si realizaría otra obra, comenta: “Obviamente, todo se puede destruir y rehacer posteriormente, lo que significaría seguramente otro edificio, con otras características arquitectónicas, de paisaje, y una nueva obra a realizar. Sinceramente, tanto la escuela de danza como la de música y el auditorio son espacios necesarios para la comunidad de esa zona, e incluso puedo afirmar que son exitosos desde el punto de vista de público y de alumnos.
Mi filosofía es la de complementar lo existente, nunca la de destruir. Además, si se necesitan ciertas adaptaciones en los espacios, casi siempre es posible hacerlas.
Actualmente, Raymundo Sesma ha realizado 40 campos expandidos entre Italia, México, Suiza y Estados Unidos. Su campo expandido-escultura ambiente “representa una nueva forma de pensar y de relacionarse con el mundo y las ideas. Significa repensar el lenguaje, el arte y su proceso; moverse intelectualmente dentro de aquella sombra que la edad moderna ha extendido debajo de la representación.
Según el pensamiento de Foucault, mi proyecto es testimonio del arte entendido principalmente como praxis, como huella y experiencia participativa. En palabras del crítico, teórico y curador Nicolas Bourriaud, se diría que nosotros no nos encontramos de frente a la construcción de un objeto, sino del proceso: lo que Nietzsche llamaría invención de posibilidad de vida y, para mí, el Centro Cultural Ollin Yoliztli respondió a esto.
El campo expandido-escultura ambiente de Sesma significa liberar a la pintura de su condición de sometimiento a lo establecido, liberarla de su bidimensionalidad y abrirla a la tridimensionalidad del espacio urbano-social.
En Italia, el artista, en colaboración con el alemán Andreas Kipar, arquitecto del paisaje para la Fundación Enrico Matei, realiza un mural de 4 mil 500 metros cuadrados, en la localidad de Viggiano, provincia de Potenza, en la región de Basilicata, cerca de Nápoles, la cual concluirá este año. Será la obra más larga (más de un kilómetro y medio) que haya realizado
, añadió.