La atención y eventual solución a los problemas sociales en San Quintín por el gobierno federal no debería centrarse únicamente en la dimensión salarial, sino en los programas y acciones para resolver el problema que genera pobreza.

El comisionado para los pueblos indígenas de la Secretaría de Gobernación, Jaime Martínez Veloz, expuso que los habitantes del productivo valle viven con enormes carencias en materia de vivienda, salud, educación y desarrollo.

Los padrones de beneficiarios de los programas de abatimiento a la pobreza de la Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol)reconocen las carencias y desventajas en que viven miles de familias en San Quintín:

En materia de vivienda, 12 por ciento de los pobladores no cuenta con agua entubada (3 mil 693 casas habitación), mil 73 viviendas no disponen de energía eléctrica; no existe drenaje sanitario rural, pues únicamente disponen de fosas sépticas y pozos de absorción en las viviendas de clase media y alta, así como en los comercios de la región; la mayor cantidad de pequeñas casas donde habitan los indígenas cuentan con letrinas; también, 19.23 por ciento de las casas tienen un sólo cuarto, y 5 por ciento tiene pisos de madera.

Los datos oficiales, que tienen como referencia el censo de población y vivienda 2010, advierten que en el ámbito de la salud, 38.4 por ciento de los habitantes de la región de San Quintín carece de algún servicio en la materia.

Así, en el terreno de la educación, los datos son alarmantes. El 6.5 por ciento de la población infantil de seis a 11 años de edad, y otro segmento de jóvenes de 12 a 14 años no asiste a la escuela. Del total de la población con 15 años o más, 13 por ciento a resultado analfabeta y 14 por ciento no tiene ningún grado de educación. Por lo que el grado promedio de escolaridad es de sólo 6.4 años, equivalente a la primaria.

Por lo que respecta a la población económicamente activa, en San Quintín se han registrado 40 mil 936 personas de seis años o más que conforman la población; tenían trabajo pero no lo ejercieron o buscaron trabajo en la semana de referencia. De este universo, 26 mil 461 eran hombres y 14 mil 475 mujeres.

En relación a la cobertura y presencia de los programas sociales de la Sedesol y del resto de las dependencias que participan en la Cruzada Nacional contra el Hambre, “resalta la limitada cobertura que tienen los principales programas sociales del gobierno federal tales como Prospera, Programa de Apoyo Alimentario y Comedores Populares, los cuales únicamente atienden a 31 por ciento de la población.

El análisis que fue hecho llegar al titular de la Secretaría de Gobernación por Martínez Veloz advierte que el impulso en la presencia de los programas de la administración federal, por conducto del Programa de Apoyo a Jornaleros Agrícolas, podría significar el mejoramiento de las condiciones de vida de miles de familias, de las condiciones de la región y de la población en general.

Hasta a la fecha, el citado programa sólo atiende en San Quintín a uno por ciento de la población total; el programa de estancias infantiles sólo apoya a 147 madres trabajadoras, lo que equivale a 0.2 por ciento de la población, y el programa 3 x 1 para migrantes no apoya a uno solo de los habitantes de San Quintín. En el caso del resto de las dependencias se puede afirmar que prácticamente no tienen presencia en la región.