La pugna por las presidencias de las comisiones en el Instituto Nacional Electoral (INE) tiene su origen en que algunas dan mayor poder en determinadas coyunturas. Criticado por el consejero José Roberto Ruiz Saldaña de ejercer funciones metalegales, Marco Antonio Baños presidirá una comisión clave, la encargada de definir los estatutos para estructurar el Servicio Profesional Electoral Nacional en los estados.

Mientras, la de vinculación con los organismos públicos locales electorales (Oples) elegirá a los consejeros de 13 estados para los procesos de 2016, explica su nuevo titular Arturo Sánchez.

Comenta que las comisiones de fiscalización y la de servicio electoral se vuelven importantes, porque en el caso de la segunda emitirá el estatuto de dicho servicio electoral y después se encargará de administrarlo.

Niega que Baños sea todopoderoso en el INE. Es una ofensa, dice.

Atrás de eso está la idea de que no contamos, cuentan uno o dos y los demás somos unos borregos. No aceptó. Soy consejero electoral, influyo con mi voz y voto.

En relación con la queja del consejero Ruiz Saldaña de que fue marginado por denunciar el poder de Baños, señaló que muestra a un consejero peleado con los demás y está invitado a ser parte de la mesa de consejeros y proponer las comisiones que faltan de presidir. Yo me voy dentro de dos años. Pero los demás, quien va a estar nueve años (Ruiz Saldaña, entre ellos) van a poder presidir prácticamente todas las comisiones, porque se puede ser presidente un año. ¿Cuál inequidad?, explica Sánchez.

Otra es la perspectiva de Horacio Duarte, el único que criticó en el Consejo General del INE el mando que tendrá Baños para definir el servicio profesional electoral. Expresó que ello contribuirá a mantener una estructura priísta en los Oples.

Desde su perspectiva, el priísmo podría cerrar la pinza, ya que tiene mayoría de consejeros en los Oples y, adicionalmente, tendría posibilidad de enquistar a una burocracia afín que, además, no podrá ser removida. 

Rechazó que otros consejeros quienes no conforman el bloque priísta eviten que Baños tenga el control del servicio profesional electoral nacional, pues –afirmó– es evidente que ya pactaron una rotación conveniente de las presidencias y no han fungido como contrapeso ni ahora ni antes. 

Por eso, desde su perspectiva, tiene sentido la queja del consejero Ruiz Saldaña, sobre el incumplimiento de un acuerdo para rotar la comisión de vinculación con Oples y el ejercicio de poderes metalegales de un grupo de cinco consejeros.

En el rejuego interno, dijo, se busca mantener un acuerdo que dio origen al INE de que tenga una posición pasiva sin incentivos para fungir como árbitro independiente.

El consejero Enrique Andrade, señalado como parte del bloque afin a Baños, expresa que no existen esos grupos y cada consejero tiene un voto. Esas expresiones no ayudan a fortalecer al INE.