A cien años de su natalicio, homenaje al pintor en Bellas Artes
Creó el concepto artístico para Bajo el volcán, película de John Houston
Viernes 19 de junio de 2015, p. 5
El 17 de junio se conmemoró el centenario del natalicio del pintor mexicano Gunther Gerzso (1915-2000) con una mesa redonda en la sala Manuel M. Ponce del Palacio de Bellas Artes, en la que se abordaron aspectos poco difundidos de su quehacer artístico, como el de escenógrafo para teatro y cine.
El cineasta Jaime García expresó que Gerzso participó con las imágenes creadas para sus escenografías en la fabricación del imaginario colectivo que hasta hoy tenemos a través del celuloide como nación y cultura
.
García reconoció que la primera gran pasión del homenajeado fue el teatro. Cuando regresó a México en 1940, después de una estancia de cinco años en Cleveland, donde estudió escenografía teatral, la intención de Gerzso era dedicarse a pintar. Sin embargo, participar en montajes teatrales con Fernando Wagner no daba para comer y la pintura tampoco.
En eso llegó aquí un productor estadunidense que lo invitó a realizar en 1942 la escenografía para una nueva versión de la película Santa, dirigida por Norman Foster. Posteriormente, se fue a Holly-wood para trabajar en el filme Sombrero y de paso romper con los esterotipos que el cine estadunidense tenía muy desarrollados de lo que es México
.
Ruinas arqueológicas y soledad
Gracias a que Álvar Carrillo Gil le compró obra en los años 50 del siglo pasado, empezó a pintar decididamente
. García anotó que Gerzso tomó elementos del teatro y su pintura, como los umbrales y las escaleras, para llevarlos al cine. Curiosamente empezó a hacer escenografías de ambientes populares: cantinas, antros de mala muerte, vecindades y haciendas, cosa que más disfrutaba. Jacques Gelman, el productor de las cintas de Cantinflas, se volvió el principal coleccionista de su obra.
El cineasta, quien trató a Gerzso, recordó que muchas veces se planteó que iba acabar de director de cine. No obstante, el artista se retiró de este ámbito en 1962 y sólo regresó en 1984 cuando se le ofreció realizar no sólo la escenografía, sino el concepto artístico para Bajo el volcán, cinta filmada en México, con la dirección de John Houston.
Carlos Palacios, jefe de curaduría en el Museo de Arte Carrillo Gil, recinto que posee 15 obras de Gerzso, se refirió a éste como artista que encarna una paradoja relevante del arte mexicano moderno. Mientras la fortuna crítica de Gerzso es muy positiva en el ámbito local, su abordaje en el arte latinoamericano no es tan protagónico
.
Apuntó que el ingreso de las obras de Gerzso, junto con las de Wolfgang Paalen, a la colección Carrillo Gil, marcaron la entrada de la abstracción.
La historiadora del arte Dina Comisarenco Mirkin tituló su ponencia Los pliegues de la memoria y las ruinas precolombinas de Gunther Gerzso. Senaló que en las ruinas de los sitios arqueológicos en general, y de forma más frecuente y sostenida en las de Yucatán, el artista parece haber encontrado la metáfora inicial capaz de expresar, no sólo su sentimiento de soledad existencial, y su visión del mundo, sino también una forma de sublimación para superar el horror y para cerrarse a los logros extraordinarios de la humanidad, manifiestos a través de las ruinas que, más allá de cataclismos humanos y naturales, parecen siempre negarse a sucumbir de forma definitiva
.
También historiadora del arte, Mariana Sainz basó su intervención en el hallazgo de una serie de bocetos escenográficos de Gerzso en la colección de Fernando Wagner.
La mesa redonda estuvo moderada por Magdalena Zavala, coordinadora de artes visuales del Instituto Nacional de Bellas Artes.