El director de Interacciones llama a verificar los rendimientos
ahí está invertida la pensión de trabajadores
Viernes 12 de junio de 2015, p. 23
El mundo de los grandes capitales y los modestos fondos de ahorro de los trabajadores se cruza en un punto: la Bolsa de Valores. Lo que ocurre en el mercado accionario no es un asunto sólo de millonarios.
A un trabajador que cotiza en una administradora de fondos para el retiro (Afore) le debería importar si sube o baja la Bolsa
porque una parte del dinero para su pensión está invertido allí, expone Adolfo Herrera Pinto, director general de Interacciones Casa de Bolsa.
No estoy seguro si los trabajadores están conscientes de la relación que hay entre el comportamiento bursátil y sus pensiones. Es uno de los mitos que existen, de que si sube o baja la Bolsa ese es un asunto de ricos
, comenta Herrera Pinto.
Después del estallido de la crisis financiera mundial de 2008-2009, los bancos centrales de los países desarrollados, el de Estados Unidos a la cabeza, redujeron a niveles mínimos históricos sus tasas de interés de referencia. Uno de los resultados de esa política monetaria fue reducir el atractivo para el ahorro, dado que las tasas de interés para los depositantes se volvieron negativas, una vez descontada la inflación.
–Las bajas tasas de interés hacen atractivo para las personas que disponen de recursos buscar otras alternativas al ahorro, como las sociedades de inversión. ¿Qué espera que ocurra respecto del uso de instrumentos financieros para invertir?
–Tiene que ser algo creciente. Es una cuestión de tiempo que suban las tasas de interés, primero en Estados Unidos y después en México. Entonces será más atractivo cierto tipo de inversiones. En los pasados tres años, la Bolsa de Valores no dio rendimientos espectaculares. Ahí es donde Interacciones puede diferenciarse. En sociedades de inversión tenemos un fondo que ha pagado por arriba del mercado bursátil varios años.
Las nuevas generaciones que tienen acceso a más información desde la escuela y después en su vida laboral, ya tienen alternativas de inversión, desde la más sencilla, que es la Afore. Cuando entran a trabajar automáticamente la obtienen. Es un mercado creciente.
–¿Cuál es la magnitud de ese mercado?
–Una forma de medir es el número de cuentas de inversionistas en la Bolsa de Valores. Son 250 mil o 300 mil. Pero hay mucha más gente que participa. Detrás de las Afore hay muchos que invierten en el mercado de capitales (acciones de empresas que se negocian en la Bolsa); atrás de las sociedades de inversión hay muchos inversionistas que participan en el mercado de capitales (bonos). Una forma de medir es con el crecimiento que han tenido las sociedades de inversión. Ahí incluyo a las Afore, que son inversionistas profesionales, no están sólo en bonos del gobierno.
–Sobre las Afore. ¿Cómo explicar a los trabajadores que lo que ocurre en la Bolsa va a tener alguna relación con su pensión?
–Creo que se comunica razonablemente bien cuando se habla del rendimiento, porque está implícito. Cuando una persona tiene 35 años entra a una de las Afore que, de acuerdo con el rango de inversión por edad, es de las más agresivas. Esto quiere decir que invierten más en valores de renta variable (acciones en la Bolsa) nacionales o internacionales. La forma en que puede percatarse de eso es mediante el rendimiento. Y es donde éstos pueden ser más diferenciados entre las distintas Afore, igual que las mismas sociedades de inversión. No estoy cierto si la gente está consciente de que si sube o baja la Bolsa crean que eso es de los ricos, y no le dan importancia. Pero le debe interesar a un trabajador porque su Afore seguramente tiene un componente de inversión en acciones.