Estudiantes del Instituto Politécnico Nacional (IPN) desarrollaron un dispositivo que a partir del análisis de los movimientos oculares de una persona determina la forma en que ésta puede adquirir conocimientos con facilidad.

Según explicaron, hay tres vías fundamentales para aprender: la visual, la auditiva y la corporal. A partir de los datos que aporta el dispositivo se puede obtener un diagnóstico respecto de cuál de las tres es la óptima para la persona analizada.

El proyecto, denominado Herramienta para la detección de canales sensoriales mediante reconocimiento de patrones de movimientos oculares, fue desarrollado por Juan Miguel Martínez Jiménez y Patricia del Pilar Solórzano Villanueva, politécnicos de la Escuela Superior de Cómputo (Escom).

Los jóvenes explicaron que el dispositivo funciona con base en la rama de la sicología denominada programación neurolingüística. El dispositivo consiste en una diadema provista de una pequeña cámara infrarroja, que graba un video del movimiento ocular involuntario en el momento en que el interlocutor formula preguntas. Inmediatamente después, un sistema informático analiza la pupila en cada movimiento y genera una gráfica en la que se establece el número de acciones hacia arriba, en medio o hacia abajo.

Indicaron que la aplicación de algoritmos inteligentes les permitió establecer las categorías en las que se clasifica el aprendizaje de los individuos, así como realizar el análisis de las imágenes. Precisaron que aunque la mayoría de las personas aprendemos de las tres formas básicas mencionadas, siempre hay un canal sensorial que predomina, lo cual es bueno saber, sobre todo en el momento de elegir técnicas de estudio.

Por la aportación que esta diadema representaría para los profesores o especialistas en sicología, Juan Martínez y Patricia Solórzano no descartaron la posibilidad de llevar el proyecto al Centro de Incubación de Base Tecnológica del IPN.