Martes 2 de junio de 2015, p. 14
Dallas.
La legislatura de Texas concluyó ayer su 84 periodo bianual de sesiones con la aprobación en los pasados 140 días de más de 800 proyectos de ley, sin que pudiera dar luz verde varias iniciativas antinmigrantes.
Entre las iniciativas aceptadas figura una serie de estatutos para reforzar la portación de armas y limitar el poder de los gobiernos locales.
Las iniciativas suman menos de 10 por ciento del total de casi 10 mil proyectos de ley que fueron presentados y que a partir de este lunes quedaron anulados.
Algunos proyectos de ley que no prosperaron incluyen las propuestas antinmigrantes de subir las colegiaturas en universidades públicas a estudiantes indocumentados o la de prohibir las denominadas ciudades santuario, donde la policía local no investiga el estatus migratorio.
Además, una iniciativa de ley para aumentar de 17 a 18 años la edad en la cual una persona puede ser juzgada como adulto en Texas, aun cuando la Suprema Corte de Justicia de Estados Unidos ha establecido los 18 años como el inicio de la adultez.
Impulso a la posesión de armas
Entre las medidas enviadas al gobernador de Texas, Greg Abbott, para su promulgación legal, destacan dos que refuerzan los derechos a la posesión y portación de armas de fuego.
Los legisladores de Texas aceptaron una medida que autoriza a los residentes de la entidad llevar y mostrar abiertamente armas de mano si cuentan con una licencia para su portación.
Desde 1995, los texanos están autorizados a portar armas en forma escondida si tienen los permisos necesarios, pero la nueva legislación les permitirá portarlas enfundadas a plena vista.
Los legisladores también dieron luz verde a una medida que permite portar armas ocultas dentro de los campus universitarios.
Los legisladores aceptaron un presupuesto general de 209 mil 400 millones de dólares para los próximos dos años e incluyeron en el mismo destinar 310 millones de dólares para la vigilancia de la frontera con México.
Durante su 84 sesión, el Congreso también admitió la primera iniciativa que autoriza en forma limitada el uso medico de la mariguana, al permitir que los pacientes con epilepsia utilicen aceites sin componentes de la cannabis.
Esta última iniciativa fue promulgada este mismo lunes por el gobernador Abbott.