Chilpancingo, Gro.

Felipe de la Cruz, vocero de los padres de los 43 normalistas de Ayotzinapa desaparecidos, lamentó el papel que juega Rigoberta Menchú Tum, enviada por el Instituto Nacional Electoral (INE) para convencerlos de que permitan efectuar los comicios del 7 de junio, y pidió a la premio Nobel de la Paz que no se meta en situaciones relacionadas con el deber moral de buscar a sus hijos.

De la Cruz dijo que las declaraciones que la guatemalteca hizo en Acapulco, cuando pidió prudencia a las organizaciones que pretenden boicotear las votaciones y a los familiares de víctimas de la violencia entrar en un proceso de construcción de paz y participación ciudadana, están fuera de contexto, porque no conoce la realidad de nuestro estado ni lo que ocurrió en la normal de Ayotzinapa. Si quiere saber la verdad, que pregunte a quien le está pagando por hacer esos comentarios.

Manifestó que Menchú está al servicio de quien le pagó (el INE) y sus comentarios son resultado se eso, en favor de quien se lo pidió y le pagó, y por lógica tiene que quedar bien con quien le pagó, sostuvo.

El jueves, el INE confirmó que pagó 10 mil dólares a la Fundación Rigoberta Menchú para completar los 40 mil cobrados por la estancia de cinco días de la guatemalteca en México para promover el voto y la democracia.

Al mediodía, De la Cruz demandó a la enviada del INE que se vaya a su país a pedir el voto a su gente, pero que no venga a Guerrero, donde hay luto y dolor. Si a ella no le importa nuestra situación, está bien, pero que se vaya con los que le pagaron el viaje.

Por la mañana, después de finalizar la presentación de Menchú Tum en el teatro Juan Ruiz de Alarcón, del Centro Internacional Acapulco, la indígena Ana Yamileth Gatica Matías, de 27 años, originaria del municipio de Acatlán, subió al escenario y reprochó a las autoridades la situación de inseguridad y zozobra en el estado.