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Al minuto 93, Cvitanich cobró un penal que dio el pase a los Tuzos a las semifinales

En partido trepidante, Pachuca eliminó al América con global 7-5

Los amarillos terminaron con nueve hombres por expulsiones de Goltz y Pablo Aguilar

Nos pusieron en jaque pero no claudicamos, señaló Alonso

Quedé a deber el bicampeonato: Matosas

 
Periódico La Jornada
Domingo 17 de mayo de 2015, p. a13

En un partido trepidante, no apto para cardiacos y en el que el boleto a semifinales cambió de mano de manera increíble, Pachuca eliminó al América –que terminó con nueve jugadores–, al derrotarlo 4-3, para avanzar con global 7-5.

El rostro incrédulo de la afición de las Águilas lo decía todo: la salida del estadio Azteca fue casi una procesión luctuosa. El sueño del bicampeonato se esfumó en el último minuto.

El primer tiempo no dio opción para parpadeos, porque desde el silbatazo inicial el club de Coapa se abalanzó sobre la portería de los Tuzos, que tras esa sacudida inicial se asentaron con cierto aplomo y resolvieron las incesantes embestidas amarillas.

Al minuto seis, el cuadro hidalguense realizó un saque de manos por el lado izquierdo; el balón fue para Rodolfo Pizarro, quien trazó una diagonal para Cristian Penilla, parado sin marca frente al segundo poste. El ecuatoriano definió correcto con tiro a la izquierda del portero Moisés Muñoz. Era el 1-0.

El América, puesto contra la pared, con la obligación de meter dos goles, se volcó con mayor furor. Al 12, Miguel Herrera hizo un cruce milagroso para impedir el remate de Darío Benedetto; luego el balón llegó por el centro a Oribe Peralta, pero su remate fue repelido en gran reacción por el portero Óscar Conejo Pérez.

Al 17 de acción el técnico americanista, Gustavo Matosas, ya alistaba su primer cambio, que aceleró ante la lesión de José Chepe Guerrero, quien dejó su sitio a Darwin Quintero.

El América se quedó con un hombre menos tras la expulsión de Paolo Goltz, al 32, por aplicar un planchazo sobre Hirving Lozano. El zaguero recibió roja directa, pero los de Coapa asimilaron pronto el golpe y redoblaron esfuerzos.

El premio llegó al 43, en jugada en la que el área tuza se llenó de confusión, pero Oribe Peralta no se desubicó y realizó una media chilena; al Conejo le faltó estatura, caminó para atrás y capturó, pero ya estaba dentro y se decretó el 1-1.

En el complemento, los americanistas renovaron brío y al 51 hicieron estallar en nuevo festejo las tribunas, ahora bañadas de sol, tras la anotación del paraguayo Pablo Aguilar, quien remató con sólido cabezazo; lo hizo casi sin ángulo de tiro.

Matosas creyó que estaba resuelto el juego y sacó a Benedetto para meter al contención Ventura Alvarado (51), pero dos minutos después quizá se arrepintió al ver el golazo de Walter Ayoví, quien desde la derecha remitió un cañonazo que sorprendió a Muñoz.

El estratega visitante, Diego Alonso, hizo dos cambios al 58: Germán Cano por Ariel Nahuelpán y Darío Cvitanich por Cristian Penilla. Al 80 redondeó con el ingreso de Diego de Buen por Jorge Burrito Hernández.

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Aquivaldo Mosquera y Pablo Aguilar no daban tregua en un partido de vaivenes realizado en el estadio AztecaFoto Pablo Ramos

El empate a dos goles de nuevo puso el boleto en las manos del cuadro hidalguense y dejó dubitativo a Matosas, hasta que decidió sacar a Samudio para meter a Martín Zúñiga al minuto 71. Poco después retumbó el ¡sí se puede, sí se puede! de las huestes americanistas.

Y en ese momento sí se pudo, porque al minuto 87 Michael Arroyo cobró un impecable tiro directo que se incrustó en el ángulo superior derecho del arco tuzo. Era el 3-2 que ubicaba al América en las semifinales.

Sin embargo, la euforia duró poco, pues al 93 Pablo Aguilar fue expulsado por mano en el área. Además, el silbante Roberto García decretó penal y Darío Cvitanich cobró de forma magistral para el 3-3 que devolvió el pase a semifinales al Pachuca.

Y para que no hubiera duda, Germán Cano aprovechó el alargue para encajar el 4-3 con un tiro cruzado.

Nos sentimos robados: Peralta

En el vestidor tuzo hubo festejo y adiós. El técnico Alonso despidió junto con su grupo a los jugadores Érick Gutiérrez e Hirving Lozano, quienes se integrarán a la Sub-20 que participará en el Mundial de la categoría.

Alonso dijo que el par de juegos “fue muy emotivo, dinámico… sabíamos de su peligrosidad. América nos puso en jaque y el equipo hizo lo que debía hacer: arresto anímico, ir hacia adelante, no claudicar.

Me agrada trabajar con gente joven, el futbolista mexicano tiene mucho talento y me complace que la institución dé opción de utilizarlos. Es un orgullo tener a estos chicos.

En tanto, Matosas admitió que quedó a deber el bicampeonato, pero aclaró que “no es fácil jugar 60 minutos con un jugador menos… 11 contra 11 no habría pasado. Me retengo el gran esfuerzo de mis jugadores, los felicito por el título de la Concachampions, no tengo nada que recriminarles”.

Luego acusó a Darío Cvitanich de tener pocos pantalones, porque cuando festejó su gol me insultó, el cuarto juez oyó y no dijo nada. No entendí por qué no lo expulsó y qué le dio por venir a insultarme.

No quiso hacer polémica y rechazó hablar del silbante cuando se le comentó la declaración de Peralta, quien dijo que se sentían robados y que el árbitro echó a perder el trabajo de un semestre.

En cambio, reveló que tiene en puerta un problema porque Samudio, Osvaldo Martínez, Aguilar, Arroyo, Alvarado, Oribe, Muñoz y Paul Aguilar se irán a Copa America y Copa Oro.