San Cristóbal de Las Casas, Chis.

Las autoridades del ejido La Pimienta, municipio de Simojovel, afirmaron que la muerte de dos bebés por la aplicación de la vacuna contra la hepatitis B no es un caso aislado, sino consecuencia del abandono en que se encuentra la zona.

El año pasado, un niño de cinco años que estaba enfermo no llegó al hospital y murió en el camino; en los últimos cuatro años han fallecido siete mujeres de la comunidad durante el parto y otras 16 personas por tuberculosis y cáncer, entre ellas algunos niños, agregaron.

En un documento explican que la clínica de salud ubicada en La Pimienta, una de las comunidades más pobres y marginadas de Simojovel, municipio situado en el norte de la entidad, se encuentra en total abandono, sin medicamentos y sin servicio de análisis.

Manifestaron que desde hace ocho años los habitantes de ese poblado gestionaron el cambio completo del personal de la unidad médica del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), pero el delegado respondió que no pueden hacerlo porque son basificados.

Aseguraron que la petición de cambio es porque no hay atención, (los empleados) incumplen el horario de trabajo y maltrataban a las mujeres que van a atenderse, el doctor se molesta si le hablan en tzotzil.

Las autoridades ejidales reiteraron que son pésimas las condiciones de servicio de salud en todos los municipios de Chiapas.

De acuerdo con los más recientes datos del IMSS y del gobierno estatal, hasta ayer habían sido dados de alta 20 menores y nueve permanecen internados en un hospital de Tuxtla Gutiérrez