Marcelo Ebrard señaló que la decisión del Instituto Nacional Electoral (INE) de registrarlo como candidato suplente es un duro revés para EPN (Enrique Peña Nieto) y sus aliados. Me querían en el exilio político, no lo conseguirán. La batalla continúa.

A través de Twitter, el ex jefe de Gobierno dijo que es derrota para EPN y sus partidos PRI y PVEM, mismos que –consideró– impugnarán de nuevo, por órdenes de su jefe, su candidatura ante el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), sólo que esta vez el caso ya está en la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH).

Se interpuso ante el organismo internacional un recurso para que se le otorguen medidas cautelares de manera urgente, a fin de impedir que se afecte su registro como candidato suplente en la primera fórmula de la lista de representación proporcional de Movimiento Ciudadano por la cuarta circunscripción.

Para evitar que cualquier autoridad electoral mexicana disponga, emita, acuerde o resuelva alguna decisión que violente el principio de igualdad y no discriminación en mi contra, expuso.

Ebrard pidió a la CIDH que las medidas cautelares sean transmitidas con carácter de urgente al Estado mexicano, debido a que el proceso electoral concluye con la jornada del 7 de junio, por lo que cualquier decisión que vulnere o transgreda mis derechos políticos repercutirá directamente en mi esfera jurídica, dejando un periodo prácticamente imposible para poder atacar o revertir dicha posible decisión.

Ebrard consideró que si PRI y PVEM impugnan su registro, el TEPJF tendrá que tomar en cuenta los argumentos que en defensa de los derechos humanos se escucharon en el INE.