Chilapa, Gro.

Unos 500 nahuas mantuvieron tomada por quinto día consecutivo la cabecera municipal de Chilapa para exigir a los gobiernos estatal y federal seguridad para las casi 55 comunidades.

Grupos de simpatizantes pretendieron visitar a los indígenas –quienes se autodenominan policías comunitarios– para ofrecerles apoyo, pero la Policía Federal les impidió ingresar a la ciudad.

El comandante de la policía comunitaria del poblado Ayahualulco, Juventino Abarca, dio a conocer que un grupo de ciudadanos enfrentó a los indígenas por la mañana, pero nos hicimos a un lado. Indicó que los policías que impidieron el paso a quienes los apoyan venían con el rostro cubierto; yo nunca me tapo la cara, porque no debo nada a nadie.

Bonifacio Vargas narró que un grupo criminal secuestró a sus hijos Hermes y Jairo hace 15 días, y pidió al hombre que manda a esa gente, que me los regrese vivos. Estoy muy afligido porque me he dedicado a la artesanía y si algún mal hicieron los muchachos, que se les castigue conforme a la ley.

En tanto, en el municipio de Tixtla familiares e integrantes de la policía comunitaria bloquearon en forma intermitente a la carretera Chilpancingo-Tixtla, en apoyo a la huelga de hambre que comenzó su comandanta Nestora Salgado en el penal de Nayarit, donde está presa desde diciembre de 2013.