Morelia, Mich.

Integrantes de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación, del Sindicato de Trabajadores al Servicio del Poder Ejecutivo (Staspe), empleados del ayuntamiento de Morelia y de la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo, entre otros, tomaron ayer casetas de peaje de las autopistas Occidente y Siglo XXI. Además, se plantaron en bancos, centros comerciales y la Secretaría de Educación estatal y el palacio municipal, entre otros inmuebles.

Las más de 150 organizaciones que forman el Frente Cívico Social exigen mejores condiciones laborales y repudian las reformas estructurales y la política económica del gobierno federal.

Las protestas se iniciaron a las 9 horas, cuando los inconformes colocaron piedras y troncos sobre la vía del tren, en la avenida Siervo de la Nación, en la colonia Tres Puentes.

Otros grupos se apoderaron de las casetas de la autopista México-Guadalajara en Zinapécuaro y Ecuandureo, y de las de Taretan, Santa Casilda y San Ángel Zurumucapio, en la autopista Lázaro Cárdenas-Pátzcuaro, donde permitieron paso libre.

Los inconformes además bloquearon centros comerciales hasta las 15 horas e instalaron un plantón frente a Casa de Gobierno, la residencia oficial del gobernador Salvador Jara Guerrero.

Representantes del Frente Cívico Social se reunieron el martes con el secretario de Gobierno, Jaime Esparza Cortina, con quien llegaron a varios acuerdos que, sin embargo, no fueron suficientes para impedir la movilización de este miércoles.

El dirigente del Staspe, Antonio Ferreyra Piñón, aseguró que una de las principales demandas del frente es que el gobierno del estado pague un adeudo de 570 millones de pesos a la Dirección de Pensiones de Michoacán.