Madrid.

La Audiencia Nacional española decidirá este jueves si suspende, permite o se abstrae del caso sobre la huelga del balompié profesional, convocada por la Asociación de Futbolistas Españoles (AFE), que se oponen al nuevo decreto sobre manejo de derechos audiovisuales.

La sala de lo social de la instancia judicial instruyó ayer la realización de una comparecencia entre los representantes de los jugadores y los de la Liga de Futbol Profesional (LFP), que se opone a la huelga, al considerarla ilegal.

La semana pasada, los futbolistas anunciaron que el decreto aprobado por el gobierno español el 30 de abril los afecta, por lo que convocaron a un paro a partir del 16 de mayo, lo que afectaría las dos últimas jornadas de liga en primera y segunda divisiones.

El presidente de la LFP, Javier Tebas, declaró en la puerta de la Audiencia Nacional que la huelga es ilegal, porque el decreto no afecta los derechos laborales de los jugadores, y consideró que si hay paro las dos jornadas restantes no se jugarán.

Refirió que las pérdidas por suspenderse la siguiente fecha de la liga son de 50 millones de euros (casi 57 millones de dólares).

Por su parte, el presidente de la AFE, Luis Rubiales, aseguró que la convocatoria de paro se debe a que los jugadores creen que la nueva medida de derechos audiovisuales los perjudica.

Señaló que hay muchos futbolistas que reciben presiones de sus clubes para que se juegue la jornada siguiente, por lo que reiteró que incluso para esos casos la justicia los ampara.

Ante la convocatoria de huelga, la LFP interpuso una denuncia contra los jugadores en la Audiencia Nacional para suspender el paro del campeonato y este jueves deberán dar una solución los magistrados de la sala de lo social.

El decreto sobre manejo de derechos audiovisuales concede mayor peso a los órganos directivos y a los clubes, por lo que los jugadores quieren tener mayor representación y que el reparto sea más equitativo.

Esta convocatoria de huelga indefinida, sin precedente en España, amenaza las dos últimas jornadas, especialmente el encuentro del domingo entre el líder Barcelona, y el tercer clasificado, Atlético de Madrid, que podría dar el título a los catalanes.

Tambien podría verse afectada la final de la Copa del Rey, el 30 de mayo entre Barcelona y Athletic de Bilbao.