Las mujeres y en especial las que son madres de familia contribuyen en la construcción del país que “todos queremos ver y tener… ustedes son las artífices, las pilares” de este proyecto, afirmó el presidente Enrique Peña Nieto y reconoció, junto con su esposa Angélica Rivera, la labor que realizan para formar niños y niñas de bien.

Para celebrar el Día de la Madre, Peña Nieto y Angélica Rivera vinieron a este municipio, donde más de 3 mil mujeres les dieron la bienvenida e, incansables, acompañaron su estancia con aplausos y porras. Ellos a su vez, contentos, saludaron a las asistentes a su paso y se dieron su tiempo para tomarse con ellas las ya conocidas selfies.

En esta visita, Peña Nieto inauguró la Ciudad Salud de la Mujer, que consta de dos clínicas, una de maternidad y otra de geriatría.

Antes de iniciar su discurso, Peña Nieto cedió el micrófono a su esposa.

Angélica Rivera, siempre sonriente, dijo: “las mamás realizamos un trabajo incansable, de amor y de entrega, todos los días, sin esperar nada a cambio… somos amigas, maestras, compañeras de juego, doctoras. Tenemos todas las profesiones las mamás, porque los hijos así nos las pusieron, y nos convertimos en todo lo que nuestros hijos necesitan de nosotras”.

Rivera no había tenido intervenciones públicas desde el año pasado, luego de que se dio a conocer la información de su casa en las Lomas de Chapultepec, la llamada Casa Blanca.

Ayer se dirigió a las festejadas y les dijo: ser madre es la bendición más grande que nos puede dar la vida. Somos el pilar de nuestra familia y agregó: hay que sentirnos muy orgullosas de ser mamás, porque es un privilegio hacer y formar niños y niñas de bien.

Felicitó a las madres y antes de terminar agradeció a su esposo la entrega y apoyo que nos das a todas las mujeres.

Enseguida, Peña Nieto le agradeció el mensaje, su testimonio como mamá de seis hijos: tres y tres, pero ya es una familia de seis. Muchas gracias por lo que haces por ellos, por estar al pendiente, por cuidar de ellos y ayudar realmente a la formación de nuestros seis hijos.

Al dirigirse a las mujeres reunidas en la explanada anexa a la nueva Ciudad Salud de la Mujer, el titular del Ejecutivo reconoció la labor de las mujeres, y en particular a las que además de madres son jefas de familia.

Hizo un recuento de las acciones y programas de gobierno que benefician a la población mexicana; entre otros, mencionó el seguro de jefas de familia, los comedores comunitarios y la reforma educativa.

Pero no es lo único, apuntó, porque el gobierno se ha propuesto romper inercias y encontrar los mecanismos para lograr que el país avance, tenga mayor desarrollo y progreso.

Por eso las reformas estructurales, con las cuales se buscan abrir nuevos espacios y oportunidades de inversión y para la generación de empleo. Sin embargo, dijo, es cierto, las reformas no dejan beneficios de la noche a la mañana, sino que serán graduales y algunos ya se han empezado a ver. A partir de este año se dejó de pagar las llamadas de larga distancia y bajó la tarifa de la energía eléctrica.

En materia de seguridad, reiteró, también hay avances con la disminución de la violencia, hay menos homicidios. Admitió que esta “es una tarea inacabada y no se ha agotado… no estamos satisfechos”. Pero, agregó, el gobierno sigue trabajando en la ruta correcta.

Al término, Peña Nieto y su esposa partieron un pastel y efectuaron un rápido recorrido por las nuevas unidades médicas.