El presidente de Cuba se reúne 55 minutos con Francisco en la sede pontificia
vuelva a la Iglesia católica, afirma Raúl Castro
Tal vez el 28 de mayo EU nos saque de la lista de países terroristas
, señala el gobernante
Lunes 11 de mayo de 2015, p. 19
Ciudad del Vaticano.
Si el Papa sigue hablando como lo hace, tarde o temprano voy a empezar a rezar de nuevo y volveré a la Iglesia católica, y no estoy bromeando
, afirmó este domingo el presidente de Cuba, Raúl Castro, después de reunirse durante 55 minutos con Francisco en la sede pontificia.
Castro dijo además ser jesuita en cierto sentido
, en referencia a la educación que recibió en un colegio de esa orden religiosa en Cuba, al lado de su hermano Fidel, líder de la revolución cubana.
Jorge Mario Bergoglio recibió a Castro a primera hora de la mañana, haciendo una excepción en su programa de audiencias, que nunca se programan los domingos. Pero el mandatario consiguió la excepción al preguntar a Francisco si podía hacer una escala en Roma a su retorno de Moscú, adonde acudió a la ceremonia del Día de la Victoria sobre Alemania en la Segunda Guerra Mundial.
El propósito de Castro fue agradecer personalmente al Papa argentino la mediación del Vaticano para reactivar las relaciones con Estados Unidos, congeladas desde la década de 1960, aunque las conversaciones también sirvieron para cerrar detalles de la visita que Francisco hará a la isla en septiembre.
Prometí ir a todas sus misas, y estaré encantado de hacerlo
, dijo el gobernante, después de revelar a periodistas que lee todos los discursos y comentarios del Papa, quien ha sorprendido al mundo con sus observaciones sobre las condiciones de vida de los católicos.
Respecto de las relaciones con Washington, Castro señaló que tal vez el 28 de mayo Estados Unidos nos saque definitivamente de la lista de países terroristas
–incluido en los años 80 durante el gobierno de Ronald Reagan– y acerca de su entrevista con el primer ministro de Italia, Mateo Renzi, destacó el papel que desempeña Roma para lograr un acuerdo de cooperación con la Unión Europea, a fin de 2015.
La reunión entre Castro y Francisco ocurrió un día después de que un millar de gays, lesbianas y transgéneros marcharon por las calles de La Habana durante la octava Jornada Cubana contra la Homofobia y la Transfobia, que incluyó una misa de bendición a las parejas de este tipo, aún ilegales en la isla.