La muestra Todos los mares se exhibe en la Biblioteca de México
Lunes 4 de mayo de 2015, p. 9
Mare Anguis, Mare Australe, Mare Cognitum, Mare Crisium, Mare Desiderii, Mare Foecunditatis y Oceanus Procellarum son algunos de los títulos de la serie de 22 grabados realizados por Basia Batorska (Polonia, 1933), que se reúnen en la exposición Todos los mares, muestra con la que la artista vuelve a exponer. Se presenta en la Biblioteca de México.
La textura, el colorido, la fuerza, la serenidad, la luminosidad y el movimiento de distintos oleajes imaginados y recreados por la artista plástica son muestra de la devoción que tiene por los paisajes y la naturaleza, temas constantes en su larga trayectoria.
Batorska nació el 23 de enero de 1933 en Bialowieza, Polonia, en un bosque polaco que era la prolongación de la legendaria Selva Negra alemana, donde vivió con su familia los primeros seis años de su vida. Cuando las tropas hitlerianas invadieron Polonia, en 1939, la familia tuvo que salir de aquel paradisiaco territorio, lo que fue el inicio de un doloroso exilio hacia Persia e India. Desde 1943, Basia Batorska vive en México.
Con más de 70 exposiciones individuales y otro tanto de colectivas, el paisaje es uno de los motivos más frecuentes en su obra. En esta ocasión es el mar, cualquier mar, de la Tierra, de la Luna o de Marte; de ahí que los títulos de las obras invitan al público a conocer más sobre aquello que recrea la artista.
Poderoso, bello e infinito
Son mis mares, no son mares que una persona puede visitar
, comenta Batorska. “He hecho acuarelas y acrílicos del mar, pero en esta ocasión decidí hacer grabados y llamar a la serie Todos los mares, porque es lo que siento de lo poderoso, bello, infinito y desconocido del mar.”
Por ejemplo, pregunta y evoca la artista: ¿Has ido a ese lugar donde el mar se pone furioso y se ve cómo rompen las olas contra las rocas? Eso es una maravilla que me fascina
.
En este caso, fue un trabajo que además de creatividad y concentración requirió de mucho trabajo físico, explica la pintora de 82 años, ya que cada grabado tiene diferentes rugosidades, huecos y texturas, producto de la presión que ejerció la artista sobre las placas de madera al momento de imprimir. Son trabajos realizados en 2014 y lo que va de 2015.
En el texto introductorio, escrito por Eduardo Lizalde, se reconoce el rigor técnico, la novedad y belleza
del trabajo plástico de Batorska. Basia pertenece a los creadores que no pueden pintar sin la protección de la luz natural, ni realizar convincentemente un cuadro si no pertenece a esa raza privilegiada de los cazadores de la luz. Es una maestra suprema del arte del ver y una artífice del universo cromático y las sutiles formas de su expresión plástica.
Mare Humorum, Mare Imbrium, Mare Insularum, Mare Marginis, Mare Nectaris, y Mare Serenitatis también forman parte de Todos los mares, exposición que se pude apreciar en el vestíbulo del foro polivalente Antonieta Rivas Mercado, de la Biblioteca de México (Plaza de la Ciudadela 4, Centro Histórico). La entrada es libre y concluye el 19 de abril.