El presidente de la Confederación de Cámaras Industriales, Manuel Herrera, hizo un llamado al gobierno federal para ejercer el presupuesto previsto para este año en no más de dos meses, o de lo contrario, advirtió, la situación de la actividad industrial del país se tornará más complicada.

Explicó que la desaceleración del primer trimestre del año provocó que los industriales hicieran un ajuste a sus previsiones de crecimiento de este sector a aproximadamente 3.4 por ciento contra 4 por ciento previsto para este año. Señaló que sus dos componentes más importantes que son la industria de la construcción y la manufacturera, avanzarán 3.1 y 4.2 por ciento, respectivamente. Para la economía mexicana estimó apenas un crecimiento de 2.7 por ciento .

Como alternativas Manuel Herrera dijo que la Concamin propone concentrar al menos el 70 por ciento de las adquisiciones e inversiones públicas en la primera mitad del año; suscribir un acuerdo con las autoridades estatales para que realicen sus compras e inversiones en el primer semestre del año, pero con criterios precisos de transparencia y rendición de cuentas, para evitar los subejercicios, definir sanciones precisas y controles oportunos.

El industrial dijo que durante los primeros meses de 2015, la caída en la producción y en los precios del petróleo, el encarecimiento del dólar y la volatilidad en los mercados cambiario y bursátil, impactaron las finanzas públicas y modificaron la percepción de los agentes económicos respecto al presente y futuro de la economía mexicana.

En descargo del manejo de la economía dijo que la estabilidad macroeconómica, el recorte presupuestal, el arribo de nuevas inversiones a sectores de avanzada como las industrias automotriz, autopartes y electrónica; el nivel alcanzado por las reservas internacionales y el crédito disponible en el Fondo Monetario Internacional (FMI), suavizaron los efectos negativos.

Manuel Herrera dijo que en contraste, el crecimiento de la economía es menor al previsto, se desacelera la producción industrial, lo mismo que una parte de las exportaciones manufactureras y tanto consumidores como empresarios mantienen una actitud cautelosa frente al escenario nacional.

Ante estas circunstancias el empresario se manifestó por un manejo responsable y transparente de las compras gubernamentales como un instrumento de promoción económica para la reactivación del mercado interno y el crecimiento de las micro, pequeñas y medianas empresas nacionales, y propuso una serie de medidas como evitar que instrumentos como las compras por invitación o por asignación directa les impidan la participación a las micro, pequeñas y medianas empresas que pueden cubrir las adquisiciones y obras públicas. Nos pronunciamos por una mezcla adecuada entre licitaciones, compras por invitación y asignaciones directas.