Este gobierno vive en una gran mentira económica, en la que cierra los ojos a la realidad y no quiere escuchar a la ciudadanía, pues lejos de lo que asegura, no hay ninguna mejora en los bolsillos de los mexicanos, y ciertamente hay una gran inflación, provocada por los incrementos a los energéticos y a los impuestos, y también por la drástica devaluación del tipo de cambio.

La Unión Nacional de Trabajadores (UNT) y dirigentes de la Nueva Central de Trabajadores, coincidieron en afirmar que es inaudito que el gobierno publicite que ha habido mejoría en la calidad de vida de los ciudadanos cuando continúan creciendo la pobreza y la desigualdad, se aceleró el desplome del poder adquisitivo y la carga tributaria está pesando gravosamente sobre las espaldas de trabajadores y empresas.

En un manifiesto emitido por la UNT, esta organización, integrada por decenas de sindicatos democráticos, planteó que la profunda crisis económica y social a la que está sometida la clase trabajadora ha sido producto de una política económica rapaz, que sobrepone los intereses de las corporaciones empresariales a los del pueblo.

La pobreza y la desigualdad, siguen aumentando; el trabajo precario es la norma, y el empleo digno, la excepción; y a ello han contribuído las reformas estructurales, el quebrantamiento de los derechos laborales y la persistencia de la desastrosa política económica. El actual contexto de recesión económica y creciente desigualdad del ingreso es insostenible política y socialmente, señaló.

El país requiere de un nuevo modelo de desarrollo económico y no de más mentiras gubernamentales, indicó esta central.

Por su parte, Benito Bahena de la Alianza de Tranviarios de México, e integrante de la Nueva Central de Trabajadores, señaló que en lo que va de la administración los salarios no han tenido un incremento real, han perdido frente a la inflación.

La generalidad de los trabajadores mexicanos han perdido calidad de vida, sus dietas se han restringido, por lo que es una gran falacia, una mentira perversa, la mejoría que se pregona desde el gobierno, dijo, y agregó que el colmo son las aseveraciones del director del Banco de México, Agustín Carstens, respeto de que la devaluación no ha impactado la inflación, ya que gran parte de los alimentos llegan del extranjero, porque el país no es autosuficiente.