Por tercera ocasión en menos de un mes, la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) emitió una enérgica condena por el fallecimiento de otro mexicano, en este caso Ernesto Javier Canepa Díaz, ocurrido el viernes 27 de febrero, por disparos de oficiales del Departamento de Policía de Santa Ana, California.

Este incidente, señala la cancillería en un comunicado, causa una profunda consternación y molestia, pues se suma a los recientes fallecimientos de los mexicanos Antonio Zambrano Montes y Rubén García Villalpando, en Pasco, Washington y Euless, Texas, respectivamente, que involucran presumiblemente el uso excesivo de la fuerza, que suma ya 76 connacionales muertos desde 2006 en condiciones similares.

Agrega en el texto que debido a que estos incidentes no pueden verse de manera aislada, el gobierno de México ha hecho un llamado al Departamento de Justicia de Estados Unidos para que mediante su división de Derechos Civiles, acompañe la investigación de estos tres casos para asegurar que se conduzcan con transparencia y en su caso, se deslinde la debida responsabilidad penal o civil a que haya lugar. Asimismo, se suma al llamado de diversas organizaciones de la sociedad civil que señalan la urgente necesidad de avanzar en la revisión de las políticas y prácticas de uso de la fuerza.

La cancillería agregó que la cónsul de México en Santa Ana, California, se reunió con los familiares de Canepa Díaz y sus abogados. Asimismo, entró en contacto personal con el jefe de policía de Santa Ana y el fiscal del Condado de Orange y les dirigió misivas expresando su profunda preocupación por los hechos ocurridos, pidiendo una investigación exhaustiva y la actualización oportuna de los avances, al tiempo de solicitar se tomen las medidas que prevengan la repetición de incidentes similares.

A la consternación de sumar el tercer caso de un mexicano fallecido por el uso excesivo de la fuerza en menos de un mes, se añade la profunda preocupación por el efecto de fractura de confianza entre la comunidad hispana y las fuerzas policiacas que pudiera derivar de estos hechos, por lo que se hace un llamado a las autoridades policiacas de Santa Ana, a establecer medidas de reconstrucción de la confianza que sienten bases firmes para la seguridad colectiva. Aseguró que en estos tres lamentables casos, el gobierno de México hará uso de todos los recursos para velar por el interés de las familias de las víctimas, con el fin de que tengan pleno acceso a la justicia.