Hay cosas en la vida que más vale que sobren y no que falten; tal es el caso de las chichis, palabra que en México y otros países es uno de los tantos sinónimos de senos o pechos, que son el eje temático de la obra de teatro-cabaret Chichis pa’la banda, la cual se escenifica este sábado en El Vicio, en Coyoacán, protagonizada por Fernanda Tapia y Las Reinas Chulas.

En entrevista, Ferrnanda Tapia expresó que la idea creativa es traer de regreso la teta primigenia, el paraíso original. “Es un espectáculo interactivo 4XD y 34DD. En México se nos arrebató la teta, el alimento primigenio, y se nos expulsó del seno materno, paraíso original, y nos fuimos al averno a habitar este mundo lleno de mala leche, lágrimas y dolor. De ahí el trágico complejo del mexicano: pedir chichi pa’ todo.” Para subsanar tan terrible carencia, Las Reinas Chulas (Cecilia Sotres, Nora Huerta, Ana Francis Mor y Marisol Gasé) y Fernanda Tapia presentan Chichis pa’la banda o qué bonitos ojos tienes.

Tapia, conductora del programa de televisión El almohadazo, reiteró que esta obra surgió de la idea de que ya la gente no esté pidiendo chichi para todo. “Todos andamos buscando quién nos la haga buena: la mujer a quién le dé orgasmos, el señor a quién le lave la ropa, el político a quién le dé el voto para seguir robando. Por eso decidimos hacer esta obra para promover el destete nacional.

El hilo conductor es una niña que está en plenitud de hormonas, está creciendo y le crecen las chichis. Varias mujeres le van a explicar el poder de las chichis. El mexicano no sufre por falta de esa parte del cuerpo. Al principio yo hago un personaje, que es el de la perra de nueve chichis, y tengo que alimentar a los míos, a los ajenos, a los prestados, a los arrimados y hasta a los hijos de... Chichi es una palabra prehispánica, teta es más española. El mexicano es un mamífero de toda la vida, pero a veces se pasa.

En las funciones, el público se desternilla de risa, la pasa bien, igual que las actrices. “Primero la gente se shockea. Hay un momento en el que salgo desnuda. Así, junto a ellos. A uno le agarro la mano. Otros se suben a rascarle la chichi a la Venus del Nilo. Vamos rompiendo las telarañas y se va entendiendo de qué se trata. Hay video, buen vestuario. De los escotes... bueno, escribimos un diálogo entre dos hermanas: Nada de Pecho y Do de Pecho, quienes explican a una niña lo que puede lograr con un escote: una casota de 17 millones de varos o pasar de volada un examen. Es la educación en reversa. A mí los escotes me encantan y si no tenemos que usar nada de ropa, pues mejor. Escote y tacones... pa’ qué te cuento. Se trata de reír y pensar. Habrá a quien se le empañen los lentes, ¡pero viva la sexualidad! ¡Fuera los tabúes! Es eso de que un mortal agarre una de almohada y otra de mamila. Es pasión.”

La cita es hoy a las 22:30 horas en el teatro-bar El Vicio, ubicado en Madrid 13, delegación Coyoacán. Cover: 400 pesos.