Con dos goles en tres minutos, Chivas respiró oxígeno puro al vencer 2-1 a domicilio a La Máquina y acabó con ocho años sin victoria en el estadio Azul, en partido de la fecha siete que el equipo local ganaba por la mínima ventaja, pero quiso resguardarla con cambios defensivos y terminó con la derrota, su primera en el torneo.

Al inicio del partido los celestes demostraron solidez defensiva y durante gran parte del primer tiempo controlaron los ímpetus de un rebaño que fue voluntarioso, pero sólo eso, incapaz de resquebrajar a una zaga que parecía hecha de cemento.

El Guadalajara, verdadero local en el Azul, cuyas gradas se pintaron principalmente de color blanco y rojo, fue el más aclamado desde que saltó a la cancha a calentar. No en vano la prensa asegura que la mejor afición del equipo tapatío está en la capital del país.

Antes del pitazo de arranque Marco Fabián oró al estilo del Chicharito; de rodillas y a media cancha. Reportan que el jugador regresó más tranquilo al club de sus orígenes, pues antes era un auténtico dolor de cabeza.

Sus plegarias fueron escuchadas. Marco intentó dos disparos de media distancia; el primero fue inofensivo y el otro se estrelló en el pecho del portero Jesús Corona, pero en la recta final encajó el tanto de la valiosa victoria en la lucha por no descender.

Durante un buen rato La Máquina hizo lo que mejor sabe: defenderse. Christian Chaco Giménez fue más otro contención que el audaz creativo, pero al minuto 26 Gerardo Flores y Mauro Formica avanzaron por la derecha y metieron en apuros a la zaga visitante. En el siguiente intento hicieron estallar a su público con el gol que los puso al frente.

El ex rojiblanco Xavi Báez cedió la pelota mediante taconazo a Formica; éste filtro hacia Jerry Flores, quien definió raso y cruzado para dejar sin opción al portero Luis Michel, quien se quedó anclado. Miguel Ponce llegó con una barrida tardía.

En el medio tiempo inició una batalla campal entre elementos de la porra Sangre Azul y los granaderos que los custodiaban. Las armas fueron los palos de madera de las banderas con que la directiva dota a los barristas. La trifulca duró incluso cuando ya había iniciado el complemento.

En este periodo el técnico local, Luis Fernando Tena, buscó disipar cualquier contratiempo y sacó al debutante Rosario Cota y entre la algarabía de su afición ingresó el ecuatoriano Joao Rojas.

Sin embargo, Chivas redobló sus bríos y ambición. De nuevo encimó al cuadro local, aunque tuvo algunos contratiempos. Flores sabía que estaba en su día, pleno de confianza e inspiración, y de nuevo pisó el área enemiga para remitir un tiro bombeado que se estrelló en el larguero. Casi metía el segundo.

Pero también cumplió su labor defensiva, ya que al 48 de acción evitó el tanto en la meta local; se barrió para evitar que el tiro de Giovanni Hernández entrara cuando Corona ya estaba vencido. Al minuto 61, el suspendido técnico José Manuel de la Torre, desde algún palco, decidió la entrada de Carlos Fierro por Ponce.

El Flaco Tena no se planteó matar, regaló el juego e hizo relevos defensivos.Luego de algunos titubeos metió a Rogelio Chávez por Xavi Báez y enseguida al contención Rafael Baca por Mauro Formica. Chivas respondió ofensivo: sacó a Raúl López y entró Néstor Vidrio, luego Giovanni dejó su lugar a Aldo de Nigris.

La consecuencia fue que al 79 el Güero Fierro centró desde la izquierda y De Nigris remató sólido cabezazo que entró a la izquierda de Corona. El graderío festejó enloquecido, la afición visitante agitó brazos y clamó: “¡Chivas, Chivas, Chivas…!”

Al 82 estalló el delirio entre los aficionados rojiblancos. Se cobró una falta en el vértice izquierdo del área grande local, Marco Fabián cobró un soberbio tiro directo que contó con la colaboración de la barrera, que se abrió ante el disparo y decretó el 1-2.

A Alemao le fue anulado un gol por fuera de lugar y la fiesta fue total para Chivas.

Fierro fue importante

Héctor Real, auxiliar del Chepo de la Torre, comentó que fue importante la labor que hizo Fierro: “Él desequilibró y nos dio mayor fuerza hacia el frente. Es un triunfo muy importante, venimos a jugar contra el líder, un equipo con mucho oficio.

De visitante es muy valioso el resultado, puede ser el empujón para poder conseguir los objetivos trazado. Siempre estudiamos al rival y trabajamos de acuerdo con lo que detectamos. Consideramos que había que jugar un poco más abiertos y resultó un buen partido.

Dijo que las indicaciones que mandó De la Torre desde el palco fueron las adecuadas: Aldo entró a hacer justo lo que se le mandó. Ahora empezamos a tener al equipo ya más completo (tras la recuperación de lesionados).

Tras las victorias de Veracruz y Puebla, dijo que haber ganado hoy fue importantísimo. La lucha para no ir a la Liga de Ascenso está muy pareja, quizá los involucrados están jugando mejor que otros equipos.

En su oportunidad, Tena manifestó: “Fue un buen partido, de ida y vuelta, parejo. Estaba para un empate, pero al final lo definió Marco con un golazo de tiro libre. El partido fue interesante para el público, a Chivas le salió bien.

Se defendió cuando se le preguntó si se equivocó en los cambios o fueron los jugadores los que perdieron: “Ganamos todos o perdemos todos, no se puede señalar a nadie. Nos duele, tenemos que sacar lecciones, queríamos seguir de líderes, al hacer ellos los cambios tenían que irse al frente y nosotros pretendíamos aprovechar esos espacios.

Estábamos en casa, con el estadio lleno y nos molesta la derrota. Estoy más molesto que preocupado porque las fallas de hoy se pueden corregir.

Aclaró que no inició con Rojas porque estuvo afectado de las vías respiratorias.