Oaxaca, Oax.

Un grupo de eurodiputadas visitó por séptima ocasión el estado para conocer los avances sobre la investigación del asesinato de los activistas Jiry Jaakkola y Alberta Cariño, perpetrado el 27 de abril de 2010 cuando participaban en una caravana humanitaria que pretendía romper un cerco paramilitar en el municipio autónomo de San Juan Copala.

Si este crimen se hubiera cometido en Finlandia, se habría resuelto rápidamente, aseveró Satu Hassi, representante de aquel país.

Reiteró: El caso de Jiry es muy simple: desde el principio hubo sospechosos y se tenía identificados a quienes portaban armas en esa región. Por ello, aseveró, la investigación no tenía por qué complicarse.

En cinco años sólo han sido detenidas dos personas y aún hay 14 órdenes de aprehensión por cumplir.

El sistema mexicano falló

Heidi Hautala, diputada de la Unión Europea y representante de Finlandia, puso en duda la protección de Oaxaca a los testigos del homicidio de los activistas, lo que es un obstáculo mayor para que se pueda hacer justicia, por lo que conminó a las autoridades a que pongan mayor atención.

Informó que medios locales dieron a conocer que testigos de este caso han solicitado asilo político en otros países ante las amenazas que han recibido luego de la detención de uno de los líderes del Movimiento Unificador de Lucha Triqui, Elías Cruz Merino. La legisladora aseveró que de confirmarse esta situación significaría que el sistema mexicano falló.