Los 203 ejidatarios de Culhuacán que se dicen afectados por la construcción de la línea 12 del Metro emplazaron al Gobierno del Distrito Federal a pagar 25 millones de pesos de indemnización por las tierras donde se construyeron dos estaciones. Amagaron con que, de no obtener respuesta esta semana, se lo exigirán por la vía jurídica con la actualización del monto y además realizarán manifestaciones.

En conferencia de prensa aclararon que no buscamos sorprenderlo, pues llevamos 15 años de lucha, aunque este gobierno lo heredó y le toca responder, pues nunca se finiquitaron las expropiaciones de 1938 y 1965, por lo que no causó ejecutoria y las tierras donde se levantaron las estaciones Culhuacán y Tomatlán siguen siendo propiedad privada.

Dijeron que están a la espera del fallo sobre un recurso de amparo que interpusieron ante un tribunal auxiliar administrativo radicado en Guadalajara, que se emitirá a finales de febrero, aunque esperamos que haya voluntad política del jefe de Gobierno, Miguel Ángel Mancera, para solucionar este conflicto, pues la actualización significaría pagar 53 millones de pesos.

Acompañado de algunos de los ejidatarios, cuyas edades oscilan entre los 62 y 80 años de edad, el representante Ernesto Fernández explicó que existe una obligación administrativa dictada por la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano y el Fideicomiso Fondo Nacional de Fomento Ejidal al respecto, pero no se ha cumplido.