En el contexto de la visita al país del presidente Recep Tayyip Erdogan, México y Turquía ratificaron ayer su interés por suscribir un tratado de libre comercio y plantearon la ambiciosa meta de llevar el intercambio comercial hasta 5 mil millones de dólares en los próximos años.

Así, y a partir de reconocer el avance económico sostenido de Turquía, el presidente Enrique Peña Nieto envió un mensaje: En toda nación democrática, las instituciones políticas que velan por el bienestar de una sociedad deben estar por encima de cualquier interés particular.

Los retos de México para este siglo, dijo enseguida, exigen romper inercias y hacer las cosas de manera distinta. Ninguna nación ha alcanzado la prosperidad y su desarrollo por accidente. Un país tiene que tomar acciones decididas, hacer cambios de fondo y remover las barreras que limitan el bienestar de su gente.

El mandatario mexicano ubicó las reformas impulsadas por su administración como un medio y no un fin en sí mismas y aseguró: La transformación va en serio y es a fondo porque de ella depende el desarrollo y el bienestar futuro de México.

Sobre la relación bilateral de México y Turquía, y al encontrarse ambos entre los 10 países más visitados, sus presidentes reafirmaron el compromiso de intercambiar experiencias en materia turística y cultural, así como hacer realidad los vuelos directos entre Estambul y el Distrito Federal –vía La Habana–, así como eliminar el visado entre ambas naciones.

Se trata de la ratificación de los temas planteados por el presidente Enrique Peña Nieto en su visita a Turquía en diciembre de 2013. Ayer, al dar la bienvenida a Erdogan en Palacio Nacional, el mandatario insistió en su interés por abrir el libre comercio con el país euroasiático.

Se han llevado a cabo ya tres rondas de negociación y este año se hará la cuarta, con la cual esperamos y deseamos concretar este acuerdo que, sin duda, vendrá a imprimirle mayor intensidad al comercio que hacemos entre las dos naciones, puntualizó.

En los años recientes, el nivel de intercambio de México y Turquía se duplicó y alcanzó mil 500 millones de dólares.

A su vez, Erdogan resaltó la similitud entre los dos países en términos de escalas económicas y una población dinámica joven. Pidió aprovechar tales condiciones hoy, cuando desde todos los aspectos, la palabra lejos ya ha perdido su significado. Todo lo lejos ahora está cerca, los satélites, el Internet y la televisión han transformado el mundo en un pueblo globalizado pequeño.

Peña Nieto ofreció a la comitiva turca un almuerzo en Palacio Nacional –donde tuvieron lugar todas las actividades de la visita–, en el cual sólo se sirvieron aguas fresca, debido a la fe musulmana de los invitados.

Entre los documentos signados en este encuentro se encuentra una declaración conjunta y un acuerdo sobre cooperación para el desarrollo, así como un memorándum de entendimiento entre las oficinas encargadas del turismo de cada país.